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Elecciones en México: Morena no reconoce identidad de género de candidato trans en Puebla
Tuss Fernández podía ser el primer hombre trans en la Cámara de Diputados de México representando a Puebla. Pero denuncia fue relegado en las candidaturas y su partido no reconoce su identidad de género.
CIUDAD DE MÉXICO. El activista y periodista Tuss Fernández podía ser el primer hombre trans en legislar en la Cámara de Diputados de México representando al estado de Puebla. Sin embargo Morena, el partido político por el que contiende, no respeta ni reconoce su identidad de género. Sin explicación lo relegó de posición en el sorteo de candidaturas. Además, aunque existe una denuncia, el Instituto Nacional Electoral (INE) no considera que lo que está viviendo Fernández sea violencia política en razón de género.
Morena no sólo ha negado la identidad de género de Fernández, sino que tampoco lo considera un integrante de las poblaciones LGBT+: en su registro no se tomó en cuenta que es un hombre trans. En la lista de candidaturas el activista no figura en la categoría de acciones afirmativas.
En México, el Instituto Nacional Electoral cuenta con medidas de acción afirmativa que obliga a los partidos políticos a dar candidaturas a personas que sean parte de alguna de estas poblaciones: personas LGBTI+, indígenas, afromexicanas, que viven con alguna discapacidad y personas migrantes mexicanas. Los partidos están obligados a ubicarlas en posiciones competitivas.
“No estamos ganando sino perdiendo oportunidades”
Tuss Fernández comunicó su situación al Consejo Nacional de Elecciones de Morena en dos ocasiones vía e-mail, pidiendo su identidad como hombre trans fuera respetada y considerada parte de las acciones afirmativas. Hasta el día de hoy no ha obtenido respuesta.
Al momento del sorteo de posiciones para diputaciones plurinominales, Morena lo relegó del lugar 1 al 22. Queda así con menos posibilidades de ocupar un escaño en la Cámara de Diputados.
“Busco hacer visible lo que estoy viviendo, claro ejemplo de cómo no estamos ganando, sino perdiendo espacios y oportunidades. El sistema no está hecho para nosotres (personas LGBT). Hay cosas a mejorar si queremos ocupar estos espacios”, dijo en entrevista Tuss Fernández.
Esta es la primera vez que Fernández busca un puesto político, pero su lucha por el derecho a la identidad de las personas trans en Puebla es una de las más largas en el país y también de las que entrañan más laberintos burocráticos. Durante cuatro años Fernández estuvo sin documentos de identificación y sin acceso a derechos básicos pues las instituciones de ese estado no reconocieron su cambio registral, hecho hace diez años en la Ciudad de México.
Sin garantía de derechos políticos
Al llenar el formulario de Morena, en el apartado de ‘género’ Tuss se anotó en la casilla de ‘otro’, así como ‘diversidad sexual’ en la sección de ‘grupo en situación de vulnerabilidad’. En ambos apartados refirió que no es una mujer y pertenece a las poblaciones LGBT.
Sin embargo, cuando Morena dio a conocer su lista de diputaciones plurinominales por medio de un sorteo, Tuss fue nombrado para ocupar la primera posición de esa lista pero apareció en el apartado de mujeres.
Al día siguiente del sorteo, Tuss apareció en el lugar número 22 registrado como hombre cis. A pesar de que Fernandez se registró como parte de la diversidad sexual, Morena no asume que él es un hombre trans.
Activistas habían advertido en esta nota en Presentes que no hay condiciones para garantizar los derechos político-electorales de las poblaciones diversas que aspiran a ocupar un cargo electoral.
Violencia política en razón de género
Cuando se dio a conocer que Tuss se registró para contender por una diputación federal, en un chat una mujeres políticas de Puebla revelaron sus datos personales. Comenzó una serie de ataques que argumentaban que estaba “usurpando lugares de mujeres”.
Además, en X recibió una amenaza que decía: “a lo mejor alcanzas al magistrade”, en alusión a Ociel Baena, la primera persona no binarie en ocupar una magistratura en el Poder Judicial electoral en México y que el 13 de noviembre fue asesinade junto a su pareja, Dorian Herrera.
Tuss denunció los hechos ante el Instituto Nacional Electoral (INE) por violencia política en razón de género y en la Unidad Especializada en Investigación de Delitos Cometidos contra la comunidad LGBTQ + de la Fiscalía de Puebla.
“El INE decidió que no configuraba violencia política en razón de género porque no soy mujer y en la Fiscalía me dijeron lo mismo, no es violencia de género”, explica.
El único recurso por el que Tuss pudo denunciar fue por ciberacoso y discriminación. “Como hombre trans es lo que te queda, a lo que puedes acceder. No creo que esté perdida la denuncia, tiene su sanción y sus medidas cautelares. Pero no es el punto porque se trató de violencia política y está cabrón que no lo puedan ver. Éste podría ser un antecedente de que la violencia política en razón de género ocurre también cuando no eres una persona cisgénero. Pero hoy no hay quien acredite mi identidad y mi identidad no es objeto de protección para el INE”, comenta Fernandez.
El INE considere la violencia política en razón de género como “aquellas acciones u omisiones, que se dirigen a la persona en razón de su género, y que tienen un impacto diferenciado ante las demás personas, afectándolas (o) desproporcionadamente, menoscabando o anulando sus derechos político-electorales”.
A pesar de ello, lo denunciado por Tuss Fernández no es suficiente para el INE.
“Estoy a la deriva y en un dilema porque claro que quiero denunciar pero tampoco quiero hacerme tan visible. Me da miedo. Lo de Ociel no fue casual. La visibilidad, el denunciar, el querer cambiar las cosas te ponen en un lugar. Si hoy vienen y me matan a nadie se le va a ocurrir que pudo ser por esto. Lo intenté”, dice Fernández. Y advierte: “Si no hay antecedentes que nos permitan cambiar las cosas vamos a seguir en las mismas”.
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