Somos millones quienes vivimos con VIH ¿Por qué parecemos invisibles?
De 120 mil personas a nivel local, de 37 millones a nivel mundial, no es posible que seamos la primera positiva con la que alguien tenga contacto. “¿Debo decirlo?”, suele ser la pregunta que divide las aguas. Y aunque no estemos obligados a hacerlo, aunque haya leyes que protegen nuestra confidencialidad, la pregunta debería ser ¿para qué debo decirlo? Y ¿en qué contexto?