Presentes analizó el aumento de crímenes de odio ante Banca de la Mujer en el Senado

La agencia Presentes fue convocada por la senadora Eugenia Duré para analizar la situación de las diversidades en Argentina. Estuvieron los papás de Micaela García, la economista Mercedes D'Alessandro y la concejala Eva Mieri.

BUENOS AIRES, Argentina. La Banca de la Mujer del Senado de la Nación realizó la última comisión del año para abordar el retroceso de las políticas de género, mujeres y diversidades. En esta ocasión, la Agencia Presentes fue invitada a participar de un panel para dar cuenta del contexto de avanzada de violencias y discursos de odio hacia el colectivo LGBTIQ+.

Estuvieron presentes también familiares de Micaela García, la economista Mercedes D’Alessandro, la concejala de Quilmes Eva Mieri y las senadoras Stefanía Cora y María Eugenia Duré, presidenta de la comisión.

El evento tuvo lugar el miércoles 12 de noviembre en el Edificio Senador Alfredo L. Palacios, una de las sedes del Senado de la Nación, en el barrio porteño de Balvanera. Junto a unas cincuenta personas presentes, la jornada ahondó en la situación a nivel nacional de las mujeres y diversidades y, en particular, en el desarrollo de la labor de la Comisión.

Avanzar a pesar del retroceso

“Hemos atravesado dos años de retroceso en las políticas de géneros, mujeres, diversidades y también con los niños, niñas y adolescentes. Hace dos años que tenemos un presidente de la Nación que nos ha llamado sus enemigas”, compartió la anfitriona y senadora nacional por Tierra del Fuego (Unión por la Patria) Duré, quien finaliza su mandato de presidenta de la comisión este año. 

Y advirtió, sobre el funcionamiento de la Cámara a la que pertenece: “Esta Comisión no funcionó durante un año y medio. Con lo cual, no pudimos avanzar, no teníamos espacio para la discusión, teníamos proyectos trabados. En la última comisión pudimos aprobar más de cien proyectos y hoy vamos a tratar 30 proyectos. Para nosotros es importante tratarlos para que lleguen al recinto y sean leyes efectivas”.

Senadoras durante la exposición.

Por más decisiones políticas

Su colega, la senadora nacional por Entre Ríos, Stefanía Cora, presidenta de la Comisión de Población y Desarrollo Humano, recordó parte de la historia reciente de los feminismos en Argentina. 

“El Ni Una Menos de 2015 nos dio una cachetada. Fue advertir que si no estábamos movilizadas y organizadas esos crímenes se iban a seguir profundizando. Muchas veces cantamos: ‘Señor, señora, no sea indiferentes, nos matan a las pibas en la cara de la gente’, porque lo que necesitamos es que la sociedad se involucre”, dijo.

En este sentido, subrayó: “Necesitamos que la sociedad advierta esta pandemia que vivimos las mujeres y las disidencias: nos matan. Y de ahí para abajo y de ahí para arriba, hay brecha salarial, mujeres que faltan en lugares de representación, de tomas de decisiones políticas, de clubes, empresas. Estamos acá tratando de dar un mensaje: estamos acá. En el año 2015 no estábamos acá”.

Preocupación por el aumento de femicidios

En abril de 2017 ocurrió un femicidio que marcó a los activismos, a las mujeres, las diversidades y a las instituciones públicas, en un contexto auge de la agenda feminista desde el primer Ni Una Menos, el 3 de junio de 2015. Fue el de Micaela Garcia, una joven de 21 años, militante feminista y de Movimiento Evita, de Entre Ríos. Su familia inició una lucha incansable que dura hasta hoy. En honor a ella se nombró la Ley N° 27.499 como “Ley Micaela”. Establece la capacitación obligatoria en perspectiva de género para todas las personas que se desempeñan en la función pública en todos los niveles y poderes del Estado.

Del panel participaron su madre, Andrea Lescano, y su padre, Néstor “Yuyo” García. El hombre recordó cuando en el comienzo de la gestión de Javier Milei, el proyecto de Ley Bases buscó modificar la Ley Micaela. Recordó que aún existe la capacidad de resistencia y que hay acuerdos sociales que no se rompen fácilmente. “Estuve dos días reuniéndome con todos los bloques de la Cámara de Diputados. Y el gobierno tuvo que sacar todo el capítulo donde se intentaba modificar la Ley Micaela. Eso me dio tranquilidad”, dijo. 

Andrea Lescano, mamá de Micaela García.

La madre, Andrea, compartió la experiencia que tienen impartiendo las capacitaciones a lo largo del país. “Una cosa que decía Mica era que si todos hacemos bien lo que nos corresponde, en nuestro pequeño entorno, la suma de esas cosas va a hacer que seamos mejores y que vaya mejorando todo. A eso invitamos en cada una de las capacitaciones”, contó.

Además, subrayó un dato: en lo que va del mes de noviembre hubo un femicidio por día. “El mes pasado tuvimos lo mismo. A nivel mundial tenemos un femicidio cada ocho segundos. No esperemos a que nos suceda, como nos pasó a nosotros, a que nos toque de cerca para poder activar. Tenemos en nuestras manos que esto vaya disminuyendo. No va a ser fácil, pero está en cada uno de nosotros cómo nos comprometemos con la temática”, destacó.

Crímenes de odio: el rol del Estado

En relación a la diversidad sexual, otro enemigo construido por el gobierno nacional, los crímenes de odio aumentaron un 70% en el primer semestre de este año, en comparación con el mismo período del año anterior. En un contexto de proliferación de discursos de odio, desinformación, eliminación de políticas y de instituciones del Estado a cargo de tratar las violencias por motivo de género.

“Este año comenzó con el discurso de nuestro presidente en Davos, donde entre otras cosas comparó a la homosexualidad con la pedofilia. Tuvo una respuesta contundente: días después se autoconvocó una multitudinaria Marcha Antifascista y Antirracista del Orgullo en el centro de la Ciudad de Buenos Aires en respuesta. Pero también vimos un aumento en las violencias en los días siguientes. De hecho registramos cuatro ataques a lesbianas en dos semanas. Si bien esto no es consecuencia directa de un discurso, entendemos que se crea un escenario hostil, en el que personas que quizá pensaban algo pero no lo nombraban, hoy se sientan completamente legitimadas desde el oficialismo para hacerlo”, compartió la periodista de Presentes y trabajadora de Télam, Agustina Ramos.

El lugar del periodismo

“En los últimos años se nos planteó mucho la disyuntiva de qué hacer ante cada ataque del gobierno, sobre todo a las diversidades. La población LGBT de la Argentina es una de las más castigadas por este gobierno. Desde nuestro lugar queríamos comentar la necesidad de que la comunicación de esta temática sea en forma colectiva. Tratar de contribuir, por un lado, a la educación, entendida en términos de qué informamos, para qué estamos. Como periodistas tratamos de generar un discurso que tenga también noticias positivas, contar las experiencias buenas del colectivo LGBT”, compartió Maby Sosa, también editora de Género en Tiempo Argentino e integrante de la Red de Editoras de Género impulsada por el Fondo de Población de las Naciones Unidas.

Además destacó la importancia del rol del periodismo de calidad en contextos de desinformación. “Este gobierno no solo ha atacado a las mujeres, a las diversidades sexuales. También ha atacado al periodismo no hegemónico, al periodismo que trata de hacer un trabajo en territorio y de contribuir para una sociedad igualitaria, con justicia social”. Y resaltó el rol que ocupaba la Agencia Nacional de Noticias Télam -hoy vaciada por el gobierno nacional- en la producción de notas que luego eran insumos para los observatorios que registran femicidios. 

Hoy, desde Presentes se lleva adelante un Mapeo de Crímenes de Odio para registrar los ataques y asesinatos a personas de la comunidad LGBTIQ+. Además tiene una unidad de verificación de datos de género y diversidad, desde la que se busca aportar a la lucha contra la desinformación con más periodismo y menos prejuicios, que se llama La Factoría.

“No tenemos presupuesto y eso es ya un dato»

En el plano presupuestario, la economista Mercedes D’Alessandro fue enfática: “No hay una norma, un registro contable ni objetivos”. 

“Desde que asumió este gobierno de Milei no tenemos presupuesto y eso es ya un dato. Todos los debates en torno a las partidas para atender la violencia de género, pero también las brechas de desigualdad salariales, de inserción laboral, la construcción de espacios de cuidado (hacer jardines, escuelas, centros culturales, un playón deportivo) hoy se resuelve al boleo”, dijo. Y destacó algunos datos: “El Programa Acompañar llegó a más de 300 mil mujeres desde el 2020 a 2024. Hoy está en menos de 8 mil beneficiarias por el desmantelamiento”. Además, 9 de cada 10 mujeres no va a poder jubilarse porque no tiene los aportes cuando llega la edad jubilatoria. 

Mercedes D’Alessandro durante su exposición.

Durante la jornada estuvieron presentes estudiantes adolescentes de una escuela técnica y las panelistas destacaron la necesidad de pensar en y con las juventudes. “Es fundamental que las juventudes vuelvan a sentir a la política como un espacio seguro, de transformación, de convocatoria”, compartió la concejala Mieri. También destacó la necesidad de pasar a la acción. “Hay una diferencia entre empatía y solidaridad. La empatía es la comprensión emocional del otro. Y la solidaridad es la acción. Me parece que hoy nuestra patria tiende más a buscar la empatía entre individuos y no la solidaridad colectiva, que es la pieza fundamental de la justicia social, de la política como herramienta de transformación”, dijo. 

“Que el árbol tampoco nos tape el bosque –agregó la senadora Cora–. Estamos viviendo una realidad horrible, un presidente y funcionarios que nos desprecian públicamente, sí. Pero abajo, en el sustrato de las redes de esto que somos hay funcionarias que todavía siguen llevando la Ley Micaela, que se preocupan porque la educación sexual integral sea una realidad en sus localidades. Eso también está pasando. Las convoco a seguir luchando por una sociedad más justa”.

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