SANTIAGO DE CHILE, Chile. En su campaña presidencial, Gabriel Boric dijo incontables veces que la esperanza debía ganarle al miedo. Y anoche ganó. El ex diputado de 35 años será el próximo presidente de Chile, después de derrotar al candidato de extrema derecha José Antonio Kast en la segunda vuelta de las elecciones, con el 55,87% de los votos, frente al 44,13% del abanderado del Frente Social Cristiano. 

Desde que el voto dejó de ser obligatorio en 2012, ninguna elección -salvo el plebiscito constitucional de 2020- había superado el 50% de participación. Ese hito convirtió a Boric en el presidente más votado de la historia del país. En marzo de 2022 sucederá a Sebastián Piñera al asumir como el jefe de Estado más joven que haya tenido Chile, el primer millennial. 

Quién es Bóric y de dónde viene

Hace una década Boric no era muy conocido. Su saltó a la política ocurrió en 2011, al consolidarse como uno de los líderes del movimiento estudiantil que tomó las calles del país demandando educación gratuita y de calidad, cuando Piñera fue presidente por primera vez.

Un año más tarde fue electo presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile. En 2013 se convirtió en diputado, con la primera mayoría de votos en su distrito.

Anoche, las calles de Santiago estaban repletas. Miles de personas salieron a celebrar y acompañarle en el triunfo. Se congregaron alrededor de un escenario que su comando improvisó en la Alameda, la principal vía de la capital. Entre la multitud ondeaban banderas de Chile, de la diversidad y del pueblo mapuche.

Primer gesto hacia pueblos originarios

Boric inició su primer discurso como presidente con un gesto a los pueblos originarios: «Buenas noches, Chile. Po nui, suma aruma, pun may Chile». «Po nui» significa buenas noches en Rapa Nui; «suma aruma» es lo mismo pero en lengua aymara; y «pun may», en mapudungun.

Destacó el rol de niños y niñas, mujeres y diversidades. “Quiero agradecer con especial énfasis a las mujeres de nuestra patria que se organizaron por todo el territorio para defender los derechos que tanto les ha costado alcanzar. Desde cosas tan básicas como el derecho al voto que algunos osaron cuestionar, hasta el derecho a decidir sobre su propio cuerpo o el derecho a la no discriminación por el tipo de familia que hayan decidido formar. Cuenten con nosotros, ustedes serán protagonistas de nuestro gobierno”, dijo. 

«Boric siempre ha sido un aliado”

En ese primer discurso también le habló a las disidencias y diversidades. “En nuestro gobierno, la no discriminacion y detener la violencia en contra las diversidades y las mujeres, junto a las organizaciones feministas, va a ser algo fundamental”. 

En un país donde la violencia en contra de la comunidad LGBTIQ+ y los crímenes de odio crecen año tras año, las palabras de Boric tranquilizan a organizaciones y activistas. En las últimas semanas, muchx sintieron muy de cerca la amenaza de retroceder en los pocos logros y espacios conquistados. 

“Siento mucha esperanza”, dice a Presentes Alessia Injoque, activista trans y directora de la Fundación Iguales. “Boric llega con el compromiso de luchar contra la discriminación y la violencia, para que avancemos hacia la plena igualdad e inclusión de las personas LGBTIQ+ en la sociedad chilena. Él siempre ha sido un aliado”.

Alessia dice que también siente alivio: “José Antonio Kast fue un activo defensor de todas las barreras discriminatorias que derribamos con esfuerzo en los últimos años. Un promotor de la teoría conspirativa de la ‘ideología de género’ y otros discursos de odio”, explica Alessia. Confiesa que tras su derrota, duerme “más tranquila”.

Esperanzas y desafíos del nuevo gobierno

Para Claudia Ancapán, activista trans, matrona y mapuche, el triunfo de Boric viene a sostener y reafirmar el compromiso de las personas y las instituciones con los derechos humanos. “Hay mucha esperanza en su gobierno. La principal razón es haber ayudado a esquivar esta tendencia hacia el totalitarismo extremo, sesgado y disfrazado de progresista. Es un triunfo de la razón por sobre la inoperancia y la negligencia”. 

Pero los desafíos no son sencillos, dice Claudia. “Tiene la tarea de impulsar leyes basadas en los derechos humanos que nos permitan consolidar el cambio social y cultural del respeto hacia todo aquel que se sienta diferente en este país”. 

Eso incluye a la diversidad sexual, y especialmente a la comunidad trans. Para Claudia, necesita ampararse en una ley integral que contemple la salud. Pero también a los pueblos originarios: “Cuando buena parte del país se niega a ver la realidad, las diferencias y riquezas culturales y la urgencia de los cambios sociales, necesitamos leyes que favorezcan una mirada intercultural y el reconocimiento de nuestros pueblos indígenas. Por eso el trabajo de la Convención Constitucional es tan importante. Ojalá que Boric también se cuadre con esto”. 

Constanza Valdés, abogada trans y codirectora de la Asociación de Abogadas Feministas de Chile (Abofem), celebra que en el programa de gobierno de Boric las mujeres y disidencias sexuales tengan un espacio relevante y pueden verse favorecidas con el impulso. Por ejemplo, de una Ley Integral de Violencia de Género y una Ley Integral Trans: “Nuestro horizonte es no permitir que nunca más el fascismo ni las campañas del terror tengan tanto espacio y cabida en nuestra democracia y sociedad”, reclama. 

Las propuestas: mujeres, disidencias y pueblos originarios

Uno de los ejes principales del programa de Boric es la mirada feminista, transversal e interseccional que promete incorporar en su gobierno, con planes y leyes concretas en beneficio de mujeres, disidencias y pueblos originarios. Estas son algunas de las apuestas paras mujeres, disidencias y pueblos originarios que destacan en los 18 ejes de su propuesta y que están disponibles para consulta en https://boricpresidente.cl/propuestas:

Salud sexual y reproductiva integral

“Presentaremos una ley marco de derechos sexuales y reproductivos que reconozca la diversidad de personas y sus distintas necesidades, y establezca el deber del Estado de dar cumplimiento al pleno ejercicio de los derechos sexuales y reproductivos”.

“Generaremos una política con énfasis en estrategias de prevención del VIH y otras ITS, dentro del plan de educación sexual integral, con una perspectiva centrada en la protección de los derechos de las personas que viven con VIH y en el término de la estigmatización de la enfermedad”.

“Legalizaremos el aborto, estableciéndolo como una prestación de salud garantizada y dotando a los centros de salud de métodos recomendados de evacuación uterina (mifepristona, misoprostol y AMEU)”.

“Garantizaremos prestaciones de salud especializadas enfocándonos en grupos que históricamente han sido marginados en las prestaciones de salud sexual y reproductiva, como personas LGBTIQ+, personas mayores y adolescentes”.

Salud mental como prioridad 

“Aumentaremos la cantidad de trabajadores capacitados en salud mental en los equipos de salud (por ejemplo, en primeros auxilios psicológicos), capacitaciones para mejorar la accesibilidad y aceptabilidad de servicios de salud mental para población LGBTIQA+”. 

“Fortaleceremos la atención de salud mental para personas LGBTIAQ+ desde la atención primaria, reconociendo las necesidades específicas de la diversidad sexual con foco en adolescentes y jóvenes, garantizando la atención desde un enfoque de derechos humanos y perspectiva de género”.

“Potenciaremos el trabajo con el Sistema Nacional de Cuidados, y generaremos programas integrales que se hagan cargo de las consecuencias en salud mental de la violencia de género en mujeres, niños, niñas y adolescentes y disidencias”.

Inclusión escolar

“Impulsaremos una Ley de Educación Sexual Integral en todos los niveles de la enseñanza como pilar de una educación igualitaria que reconozca la diversidad sexual, cuestione los estereotipos de género y enseñe los derechos sexuales y reproductivos de las personas”.

“Crearemos programas de formación en el área para los trabajadores de la educación, con foco en ambientes seguros y en la prevención de la violencia sexista y homofóbica y del suicidio juvenil de la población LGTBI+”.

“Avanzaremos en el reconocimiento de la pluralidad de las culturas en los jardines infantiles y escuelas, respetando el principio de plurilingüismo de los pueblos originarios y comunidades con sordera”.

Igualdad en la diversidad: Plan Nacional de Derechos Sociales LGBTIAQ+

“Impulsaremos un plan que garantice la protección y promoción de los derechos sociales de las diversidades y disidencias sexogenéricas”.

“Fomentaremos acciones afirmativas que garanticen el derecho al empleo, trayectorias laborales de calidad y frenar el acoso laboral de personas LGBTIAQ+ a través de programas de formación y capacitación laboral. Desde el Estado desarrollaremos protocolos y circulares que garanticen las políticas de no discriminación e impulsaremos el Cupo Laboral Trans”.

“Impulsaremos una Ley Integral Trans que garantice el fin de las exclusiones, discriminaciones e injusticias históricas de las que han sido víctimas las personas trans. Promoveremos la participación de la población LGBTIAQ+ en las instancias de representación sindical, incluyendo negociaciones colectivas, independientemente del régimen laboral”.

“Resguardaremos una educación no sexista e inclusiva. Fomentaremos programas de escuelas libres de discriminación para la diversidad sexual. Se contará con datos oficiales de violencia hacia personas LGBTIAQ+ en comunidades escolares y se acompañará a aquellas con peores indicadores”.

“Reformularemos la circular sobre niñez trans en espacios educativos, exigiendo protocolos de no discriminación y de integración”. 

“Incorporaremos una canasta de prestaciones trans-no binaries como garantía explícita en salud, desde la perspectiva del cuidado. Que contemple atención de especialistas, cirugías, fármacos y atención psicológica. Prohibiremos las cirugías de normalización a recién nacides, estableciendo responsabilidades civiles y administrativas asociadas. Se garantizará el cumplimiento de la circular 18 en caso de niñes intersexuales”.

“Se incorporará un enfoque transversal de género e inclusión de personas LGBTIAQ+ en el currículum de las carreras de la salud. Se promoverá la investigación con un enfoque biopsicosocial en la atención en salud para la comunidad LGBTIAQ+, en especial personas trans y no binarias”.

Reconocimiento de identidades

“Modificaremos la Ley de Identidad de Género para permitir el cambio de nombre y sexo registral a menores de 14 años y establecer el procedimiento administrativo como norma general. Reconoceremos en el documento de identificación aquellas identidades por fuera del binarismo de género (carnet no binario)”.

Pueblos originarios y tribal afrodescendiente

“Generaremos un diálogo plurinacional con todos los pueblos originarios para acordar los términos de una restitución territorial. Que incluya la cuestión de las tierras antiguas y el acceso a los bienes naturales, de manera de permitirles el ejercicio de su derecho a la autonomía, evitando y reparando la fragmentación de los territorios”.

“Crearemos, en conjunto con los pueblos originarios, una nueva institucionalidad de participación y consulta indígena”.

“Incorporaremos las iniciativas autónomas de salud intercultural en el Sistema Nacional de Salud, superando el financiamiento actual basado en el DFL 36 de 1980”.

“Sustituiremos la Ley 18.314 Antiterrorista por una normativa que resguarde la vida democrática de las amenazas organizadas reales contra la vida e integridad de las personas. Y ajustada a los estándares internacionales de derechos humanos, de manera de excluir su utilización como herramienta de persecución política”.