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Escucharnos en el presente para imaginar futuros posibles: 15 Foro Internacional de AWID
“Es importante este espacio para escucharnos, para expresarnos, para llorar y para reír juntes”, dijo una activista en el 15 Foro Internacional AWID. El evento global reunió a más de 2700 feministas, transfeministas, activistas, defensoras de DDHH, artistas, personas de la diversidad y financiadoras de todo el mundo.
TAILANDIA, enviadx especial.
“Es importante este espacio para escucharnos, para expresarnos, para llorar y para reír juntes”, dijo una activista en el 15 Foro Internacional AWID. El evento global reunió a más de 2700 feministas, transfeministas, activistas, defensoras de DDHH, artistas, personas de la diversidad y financiadoras de todo el mundo.
AWID (Association for Women´s Right in Development) es una organización internacional que promueve los derechos de las mujeres, la justicia de género y la equidad social. Durante el foro realizado en el conocido “país de las sonrisas”, Tailandia, la organización aseguró un encuentro interseccional, con espacio para que las luchas locales se conecten con las globales y para construir un feminismo inclusivo. La diversidad no fue solo un discurso, fue el centro del encuentro. Participaron trabajadoras sexuales, domésticas, personas con discapacidad y migrantes, desde territorios indígenas hasta geografías insulares amenazadas por el cambio climático.
”Estamos aquí muchos territorios entrelazados y conectando por esta tierra, floreciendo en colectivo” dijo una participante afrocaribeña mientras sucedían cientos de talleres y pláticas en un recinto gigante.
Tensiones para construir
Este encuentro diverso no rehuyó a las tensiones internas de los movimientos feministas. Cuestionó el feminismo blanco y transexcluyente incorporando voces diversas y trazando puentes entre generaciones, territorio e identidades.
Fueron cuatro días de encuentro híbrido, ya que también hubo encuentro virtual y sedes en diferentes continentes. Cada sala fue un microcosmo donde historias similares, pero no idénticas encontraron resonancia y espacio para expresar sus historias, preguntas, estrategias e ideas. Los talleres y espacios de diálogos fueron vitales para discutir algunos temas como: “Solidarity Care”, “Ancestral Knowledge for Reproductive Autonomy”, “Challenges to Face the Climate Crisis from an Afro-Feminist Approach in the Caribbean”, “Disabilities Justice Space”, etc.
El foro también fue un espacio para reflexionar sobre el dinero, las financiadoras que apoyan a defensoras y organizaciones, participaron en diálogos y encuentros uno a uno con activistas. Mientras, en otra sala sucedía un “sex, Drugs and HIV Karaoke”, y en otra, se hablaba de tecnologías y biodiversidad de cara al futuro, sobre seguridad y derechos digitales, sobre derechos laborales entre muchos otros temas.
La discusión de temas fue muy amplia, pero se priorizó la escucha de experiencias situadas, complejas y tejer estrategias para combatir la violencia, la discriminación y el estigma.
La solidaridad internacional se reflejó también hacia los países que hoy están bajo conflictos armados, en ocupación y en guerra. “Lo que decepciona no es solamente los ataques de Israel, que ya lo esperábamos, sino lo rápido que quienes creíamos aliades nos dieron la espalda”.
Salud mental
El cuidado comunitario y la salud mental también estuvieron al centro del foro. “Hemos crecido en un mundo donde no hay justicia y no tuvimos lugar para imaginarla” reflexionó una participante. Los espacios de sanación colectiva fueron esenciales para imaginar movimientos sostenibles. «Priorizar el cuidado comunitario y la salud mental está en el corazón de la justicia social”, concluyó una facilitadora de un espacio para crear comunidad.
La falta de representación de mujeres gitanas o romaníes, y el enfoque neoliberal fueron algunas de las otras ideas que resonaron entre pasillos. Otra participante mencionó, “lo que aprendimos en esta edición es que necesitamos aprender a crear espacio para las heridas. Que no sea solamente compartir proyectos nuevos, formas de financiarnos y nada más, mientras muchas personas están atravesando momentos extremadamente difíciles. Hay que saber cómo acompañarnos juntes y dar lugar a esto también”
Un cierre para pensar
Las dinámicas de encuentro, diálogo, juegos, creaciones artísticas, ballroom, drag, comidas, expresiones, fashions y más, fueron espacios para desafiar las lógicas extractivistas que han permeado incluso dentro de los movimientos sociales.
El foro cerró con preguntas abiertas: ¿ Que tan valientes somos y cuánto más valientes podemos ser si nos tomamos de las manos? ¿Qué tan posible es tu amor por lo que es posible?
Cada grupo participante tuvo espacio para dar un starlet de cierre, entre ellas Moira Millán dio unas palabras y ofreció un canto a las más de 2700 personas presentes. Fue una invitación a continuar el trabajo e imaginar un feminismo que pueda confrontar las estructuras de poder y las propias contradicciones.
Fue un foro logísticamente pensado para todas las personas participantes donde la accesibilidad fue protagonista. Y el abrazo y cuidado de todas las personas tailandesas hizo que nos sintiéramos acogidas y apapachadas.
”Cada une de nosotres está en el centro del espacio” dijo otra participante. El 15 Foro internacional AWID sembró preguntas y prácticas para florecer en los movimientos futuros.
Esta cobertura fue posible gracias a la invitación de Astrea para sumar a conversaciones futuras.
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