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Alok V Menon entre el filo y la ternura para dinamitar los géneros
Poeta, escritore, oradore y una revolución en el mundo de la moda, este performer dinamita todos los estereotipos de género. Perfil y crónica de su paso por Argentina.
“Yo te amo más de lo que vos puedas odiarme a mí”, dijo este miércoles 26 Alok V Menon durante su única presentación en la Sala Niceto de Buenos Aires. Poeta, escritore, oradore y una revolución en el mundo de la moda, este performer dinamita todos los estereotipos con una rabiosa dulzura.
Es trans, no binarie y tiene un talento que invita a repensar y desafiar cada una de las etiquetas que adoptamos. Nacide en Texas y con fuertes raíces indias, su casa fue un espacio seguro. En ella también abrazaba la presencia de su tía, la abogada lesbiana y activista Urvashi Vaid. Ella nació en Nueva Delhi, llegó a Estados Unidos muy joven y desde temprana edad fue parte de los movimientos LGBT y se convirtió en una referente importante durante la crisis del sida. Alok la nombra seguido en sus entrevistas, como parte del clan familiar que le cobijó.
“Las personas cis en la sala tienen permitido reírse de mí durante una hora y no van a ser llamadas transfóbicas”, escupe con un rostro pícaro y una lengua corrosiva. Alok subvierte los mensajes de odio que hemos recibido las personas LGBT+ y se las enrostra a la sociedad entera con un arma letal: el humor.
Lejos de la banalidad y de convertirse en el remate de la broma a sí misme, construye una narrativa troyana. Un caballo construido de saberes, lecturas, historia y vivencias, junto a modas hipnóticas y combinadas a la perfección. Tiene un humor ácido y astuto, que termina traficando reflexiones necesarias no sólo para vivir un buen momento sino también para sobrevivir, no sólo como identidades, sino como sociedad.
Deshacer el género
“Un legislador hizo una lista de 850 libros que le resultan inapropiados para las escuelas públicas de Texas, incluido mi libro ‘Beyond…’, no tuve otra chance que leer la lista entera y me shockéo ver que Marie Kondo y sus chispas de alegría… ¡no estaba incluída!, yo estoy tirando de deshacernos de las normas del género, ¡pero ella quiere deshacerse de todo!”, dice Alok en su stand up con una lógica impecable y repensando quién es una amenaza mayor.
Como autore tiene dos libros de poesía llamados ‘Femme in public’ y ‘Your wound/My garden’. En «Beyond the gender binary’ (el que quieren prohibir) repasa sus experiencias como persona trans y NB. Y, sobre todo, la alegría de ser así, del viaje tantas veces difícil que esto implica y la victoria de que esto se convierta en algo así como “un regreso al hogar”. Sin caer en el soporífero discurso de autoayuda, este libro brinda herramientas para que cada viaje sea personal, único y nuevamente: amoroso.
En su show hay una platea cuir, outsider, apasionada, en constante búsqueda de sí misme y efervescente. El comienzo del show queda en manos y voz de Whatever Mike quien con un “portunglés castellaneado” canta y arenga como si de himnos de iglesia se tratasen.
W. Mike canta y baila con un vestido blanco que flota en las luces del escenario para dejar un ambiente chill, cálido, para luego presentar a Alok. Coronade con una boina rosa, con una blusa floreada, pollera tableada y unos tacos flúo, cada pieza de su moda es un grito de libertad.
Cada entrevista que le hacen nos deja muchas reflexiones. En su paso por el podcast ‘Man Enough’ abordó, como suele hacer, la idea de que estamos todes luchando por la liberación, pero no puede hacernos olvidar los sectores más castigadxs.
“Cualquier movimiento que esté intentando emancipar a los hombres del apresamiento del heterpatriarcado o a las mujeres de las ideas tradicionales del género debe tener a las personas trans y no binarias en el frente porque somos las más honestas. Nosotres estamos rastreando las raíces acerca de dónde provienen estas ideas de hombría y femineidad, y vienen de una estructura binaria. Es por esto que personas como yo que somos visiblemente femeninas y masculinas, o ninguna de éstas, experimentamos la peor parte de todas estas fantasías creadas que están matando gente, que nos matan”.
La moda como trinchera
Leer y escucharle ayuda a comprender que la pasarela también puede convertirse en una marcha cargada de mensajes políticos. “Creo que la moda debería ser una celebración de la belleza. Creo que el binarismo de género es un obstáculo para la belleza. Limita nuestra autoexpresión y confina nuestra imaginación estética”, dice Alok. Y cuenta de las veces que le dijeron que “no era trans por vestir de modo masculino”, mientras comparte con bellísimo detalle lo femenino que le resultaba utilizar corbata de moño. No se trata de tranquilizar las expectativas ajenas, se trata de encontrase a une. No hay una sola manera de ser trans o de ser NB, como tampoco hay una sola manera de ser hombre, mujer y tantas identidades más. Nuevamente, su mensaje nos encuentra en la misma vereda. No es necesario que pensemos de la misma manera para luchar por los mismos derechos.
“Se visten para mostrar sus genitales, ¡paren de sexualizar la ropa!”, grita Alok con una rabia cómplice con toda la platea que entiende en este chiste un manifiesto y una crítica a la imposición de género basada en la (silencio solemne) (abrimos comillas) biología (cerramos comillas). Por suerte para nosotres, elle sigue hablando, creando, dudando, celebrando y compartiendo. Porque por más político que suene todo lo que dice, elle aclara que además de eso, todo lo que estamos sucediendo es un acto de amor. Y cierra con un mensaje, una promesa, una propuesta y una esperanza: “lleguen a viejxs”. Para muches este show es el comienzo de una nueva vida.
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