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México: Exigen justicia por el brutal transfemicidio de Dani Millan
La familia de Dani junto a amigues marcharon para pedir que se investigue el crimen de la mujer.
CIUDAD DE MÉXICO, México. Dani Millan fue asesinada a golpes en la Ciudad de México. Tenía 35 años y era dueña de una estética. La noche del 19 de enero salió de su trabajo para una reunión. Su familia perdió contacto con ella y la madrugada del 20 de enero la encontraron con signos de violencia física en la vía pública de la alcaldía Gustavo A. Madero (GAM). El crimen se investiga bajo el protocolo de feminicidio.
La familia de Dani no tiene claridad de qué pudo haber pasado con ella la noche del 19 y madrugada del 20 de enero. Solo saben que tomó un taxi para llegar a una reunión en donde estuvo, al parecer, con dos hombres. Uno de ellos declaró ante el Ministerio Público, del otro se desconoce su paradero.
Dani fue localizada alrededor de las cinco de la madrugada entre las calles Norte 74 y Oriente 125. Su cuerpo presentaba signos de violencia física.
La alcaldía Gustavo A. Madero (GAM) es una demarcación periférica de la Ciudad de México y es un territorio con altos índices de inseguridad.
En los últimos cinco años, 17 mujeres trans fueron asesinadas en la Ciudad de México. Representan el 68% de las víctimas de crímenes de odio contra personas LGBT, de acuerdo al registro de la organización Letra Ese.
“Esto que pasó con mi sobrina me conmovió demasiado. O sea, ¿por qué a ella; por qué?… no se vale. Lo que queremos es justicia y que paguen quien o quienes sean los responsables. No hemos vivido el duelo por estar aquí y vamos a seguir hasta que haya justicia”, sostuvo en entrevista con Presentes un tío de Dani Millán.
Denuncian omisiones por parte de autoridades
Familiares denuncian que ninguna autoridad supo darles razón sobre en dónde se encontraba el cuerpo de Dani Millán. Tres días después del crimen pudieron reconocer su cuerpo.
La familia acudió a un hospital, al Ministerio Público de la Fiscalía de Investigación Territorial de la alcaldía GAM y finalmente al Instituto de Ciencias Forenses (INCIFO), en donde Dani se encontraba en calidad de desconocida.
“Cuando la ambulancia se lleva a mi sobrina, ella ya no tenía vida. La llevaron a un hospital en lugar de llamar a forenses. Fuimos al hospital y nos dijeron que no estaba, que la tenían en la alcaldía en la territorial 2. Cuando llegamos ahí nos dijeron que ya no la tenían, que estaba en el INCIFO. El mismo día 20, a mi sobrino no lo dejaron pasar a reconocer a Dani porque no tenían personal. Nos dijeron que volviéramos hasta el lunes 23 que porque según el fin de semana no trabajan”, cuenta a Presentes un tío de Dani Millán.
El INCIFO es una institución pública dependiente al Poder Judicial. De acuerdo a información de su página web, el departamento de identificación tiene horarios de atención en fines de semana (sábado y domingo) y días festivos 10 a 14 y 16 a 19 horas.
“Para nosotros todo el maltrato comenzó desde el policía que recibió el llamado de 911, cuando Dani estaba prácticamente muerta en la calle, y decidió llamar a una ambulancia sin dar parte a la familia. Eso y el trato en la GAM, en el Ministerio Público, fue horrible. Por eso nos movimos directo a la Fiscalía General, en donde el trato fue otro totalmente. Ese mismo día nos atendieron”, agrega el tío de Dani Millán.
La Fiscalía de Feminicidios de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México investiga el crimen y por tratarse de una mujer trans activaron el protocolo de feminicidio.
Foto: Geo González
“Dani era trabajadora, soñadora, solidaria”
Dani tenía 35 años. Cumplió su sueño: abrir su propia estética. Su canción favorita era «Las manos quietas» del músico español Juan Carlos Pérez y en los últimos tiempos el tequila se volvió su bebida favorita.
Personas que la conocieron la describen como “trabajadora, chingona, soñadora, emprendedora, fiestera, solidaria, divertida”.
Tras darse a conocer este crimen de odio sus compañeres de la preparatoria y universidad, amistades y vecines se sumaron a la exigencia de justicia que ha emprendido su familia.
“Dani es una persona con un ángel enorme. Es divertida, es amorosa. Creo que esto que hicieron fue con tanto odio contra alguien que no se metía con nadie que todavía es difícil procesar. Es difícil procesar que ya no la voy a volver a ver, ni platicar. De alguna manera, quien le hizo esto también me arrebató mi amistad con ella que duró doce años”, dijo a Presentes, Anita, amiga de Dani.
Foto: Geo González
Exigen seguridad para las personas LGBT en alcaldía GAM
El 4 de febrero, familiares, amigues y personas LGBT se manifestaron para exigir justicia por Dani Millán y seguridad para todas las personas de la diversidad sexual que habitan en la alcaldía Gustavo A. Madero.
La alcaldía GAM es considerada uno de los territorios con altos índices de violencia de género en la capital mexicana. De acuerdo al Semáforo Delictivo, delitos como violación, violencia familiar y feminicidios estuvieron, durante el 2022, por encima de la media delictiva de la Ciudad de México.
En 2021, la GAM ocupó el segundo lugar entre 100 municipios del país con mayor índice de violencia feminicida, de acuerdo a cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP).
Al no existir datos desagregados, desconocemos cómo esta incidencia delictiva de violencia de género está afectando a las personas LGBT+ que transitan o habitan en la alcaldía.
Kintsugi, una persona no binaria que conoció a Dani Millán y convocó a esta manifestación, contó a Presentes que no se siente segure en esta alcaldía.
“A Dani no la asaltaron, no le dispararon, fue pura y brutal violencia y tengo mucho miedo a esta zona, a mi alcaldía porque no necesitas mucho para que la gente aquí te agreda desde cómo te mira hasta cómo se relaciona contigo. Solo necesitas un poco de polvo morado en los ojos para que alguna persona se sienta con el derecho de agredirte y que, la pesadilla de ser víctima de transfeminicidios o crimen de odio se vuelva real. Por eso tomar las calles para exigir seguridad es vital y necesitamos de todes”.
La manifestación concluyó en la explanada de la alcaldía en donde organizadores de carnavales que estaban ahí intentaron silenciar la manifestación lanzando cohetones, golpeando e insultando a las personas LGBT+ y medios de comunicación que cubrimos la protesta.
Policías y funcionarios públicos de la alcaldía GAM que estaban presentes no actuaron para frenar el ataque.
Foto: Geo González
Autoridades de la GAM sin propuestas para prevenir violencias LGBT-odiantes
Al finalizar la marcha se tenía planeada una mesa de diálogo entre autoridades de la alcaldía Gustavo A. Madero e integrantes de la población LGBT+ con el fin de atender sus demandas.
Se solicitó la presencia del alcalde, Francisco Chíguil Figueroa, quien no se hizo presente. En su lugar, estuvieron el jefe de la unidad de diversidad sexual, Eduardo Berber Mejía y el director de gobierno, Álvaro Ramírez Romero.
En todo momento estos funcionarios públicos mostraron nulo interés en escuchar las demandas de seguridad de la población LGBT+. Entraban y salían de la sala donde se llevó dicha reunión y Ramírez Romero incluso se refirió en masculino hacia una activista trans.
Les manifestantes expusieron una lista con al menos diez peticiones directamente a la alcaldía sobre: seguridad, acceso a salud sexual, campañas de sensibilización, difusión de programas, cuota trans, entre otras.
La minuta entregada por la Alcaldía solo contempló cuatro de dichas exigencias y los funcionarios públicos presentes no brindaron propuestas de solución a sus demandas.
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