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Salta: una nena wichí fue atacada a golpes y tiene signos de violencia sexual
La niña fue hallada por su mamá en los alrededores de la escuela. Investigan a un adolescente de la zona.
SALTA, Argentina. Una niña de 12 años, integrante del Pueblo Wichí fue encontrada gravemente herida el pasado 3 de noviembre. Estaba cerca de la escuela de su comunidad, en el paraje Bajo Grande, extremo noreste de la provincia de Salta, en el límite tripartito de Argentina con Bolivia y Paraguay, a más de 570 kilómetros de la ciudad capital de la provincia.
Según informó el Ministerio de Salud de Salta, la nena presentaba una “herida de exposición ósea en la zona craneal, heridas en miembros inferiores y sangrado en su zona genital”.
Tras las primeras atenciones en el Centro de Salud de Alto La Sierra, a 15 kilómetros del lugar de la agresión, la niña fue trasladada en avión sanitario al Hospital Juan Domingo Perón de la ciudad de Tartagal. La atendieron primero en el sector de atención crítica y tuvo una evolución favorable en su estado. Eso posibilitó que fuera llevada a una sala común, donde permanece en compañía de su padre y su madre y con asistencia psicológica, informó a Presentes el gerente de este hospital, Pedro Urueña.
Cómo fue la atención
En la investigación judicial todavía no se confirmó oficialmente que la nena haya sufrido un ataque sexual. Sin embargo, Urueña indicó que “en primera instancia lo asumimos como abuso por las lesiones”. También aclaró que están a la “espera de los resultados de parte de la fiscalía”. El médico del Poder Judicial revisó a la niña el viernes último.
Apenas ingresó al Hospital de Tartagal, la niña fue atendida por una ginecóloga y se le aplicó el protocolo previsto para casos de abuso sexual, indicó Urueña, y también lo informó el Ministerio de Salud de Salta.
El gerente dijo que la niña cuenta con asistencia del Servicio de Asistencia a la Víctima (SAVIC). Contó que si bien estaba escolarizada, necesitaron de la intervención de un facilitador bilingüe para tratarla porque solo se expresa en lengua wichí.
La madre de la niña contó que fue encontrada, “tirada como un perro”, a “eso de las 6” de la mañana, por “un chango” que le avisó. La nena estaba cerca de la Escuela N° 4760, de Bajo Grande, paraje que está dentro del municipio de Santa Victoria Este, de mayoritaria población indígena.
La investigación judicial
La mujer dijo que su hija había salido “como a las 10 de la noche”. Iba a ver televisión en familiares de la misma Comunidad Bajo Grande, era algo que solía hacer habitualmente y que salía con otros adolescentes amigos.
Tanto la madre como el padre de la nena están en el Hospital de la ciudad de Tartagal y se turnan para cuidarla. Para no dejar soles a sus otres cuatro hijes, les trajeron con elles a Tartagal. Están bajo el cuidado de integrantes de una comunidad indígena que habita en la zona cercana a esta ciudad.
Por la agresión fue señalado otro chico también integrante del Pueblo Wichí, que tiene menos de 14 años, informó la justicia salteña. Este adolescente fue identificado. Por su edad, fue entregado en custodia a su padre y a su madre, dado que no es punible y no puede ser detenido. Fuentes de la Asesoría General de Incapaces informaron que declarará en la cámara Gesell.
Aunque todavía resta recibir la declaración testimonial de la niña agredida, que también se hará en la cámara Gesell, su madre declaró que su hija le dijo que fue atacada por “un solo chico”. Integrantes de la comunidad afirmaron que es un primo de la niña, pero esta información no fue confirmada. Por otro lado, todavía no se ha descartado la intervención de más personas en el ataque.
La intervención del Ministerio Público de Salta
Debido a la minoría de edad del presunto agresor, la investigación del hecho quedó a cargo del juez Anastasio Vázquez Sgardelis, de la Sala II del Tribunal de Juicio de Tartagal, que tiene competencia en Menores. Según informó el Poder Judicial de Salta, el magistrado dispuso una serie de medidas de protección de la víctima y de investigación. Además recibió al padre, quien amplió la denuncia policial.
El juez dispuso que intervenga el Centro de Investigaciones Fiscales (CIF) en la recolección de datos y pruebas. El Ministerio Público Fiscal de Salta informó el lunes que luego de haber “tomado conocimiento de un hecho ocurrido el pasado jueves en la localidad de Alto La Sierra, donde una menor resultó lesionada y en el que el Juzgado de Menores en turno tomó intervención por la posible participación de otro menor como sospechoso, el Ministerio Público Fiscal puso a disposición una comisión técnico investigativa” para “colaborar en el esclarecimiento de lo sucedido”.
Esa comisión especial, integrada por investigadores y técnicos criminalistas del CIF y profesionales del Departamento de Criminalística, partió ayer a Alto La Sierra.
Dado que víctima y presunto victimario son menores de edad, en este caso no intervienen fiscales penales, sino asesores de incapaces. El asesor Juan José Andreu representa a la nena, y la asesora María Fernanda Chocobar, al niño.
Referentes comunitarios de Alto La Sierra aseguraron que el violento ataque está enmarcado en la adicción al alcohol y las drogas que sufren jóvenes, adolescentes y niñes de comunidades de esa zona.
Imágenes revictimizantes
El paraje Bajo Grande está comprendido dentro de la localidad de Alto La Sierra. En ese lugar en 2015 otra nena sufrió el ataque sexual de ocho hombres criollos.
La niña víctima en ese caso, que se conoció con el nombre ficticio de Juana, venía de un historial de violencia. Incluso cursaba un embarazo como consecuencia de abusos anteriores a esa violación en banda. Este hecho fue recordado estos días, a propósito de la nueva agresión a una niña indígena.
Además de la violencia directa sobre los cuerpos de ambas niñas, estos casos tienen paralelismos en la forma revictimizante que eligieron algunos medios de comunicación para contarlos. En el caso de Bajo Grande un video de la madre junto al cuerpo ensangrentado de su hija fue difundido por varios medios. Eso habría motivado una presentación del asesor de incapaces Juan José Andreu, para que la Justicia ordene el cese de la difusión de esas imágenes.
La Red PAR (Periodistas por una Comunicación no Sexista) Salta repudió “el abordaje mediático adoptado por algunos medios de la provincia de Salta”, que
Ilustraron la noticia sobre este caso “con las fotos de la niña víctima y su madre en el lugar del hecho y en un situación de vulnerabilidad e indefensión total, demostrando así un total desprecio por la dignidad humana y por el periodismo con perspectiva de derechos humanos”. E hizo un llamamiento público “a denunciar estas publicaciones” y “a no replicarlas” para “cortar con la cadena de revictimización y estigmatización que ellas propician”.
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