Hungría aprobó una ley que niega la identidad a personas trans y no binarias

El Parlamento húngaro votó a favor de una ley que niega el derecho a la identidad a las personas trans y no binarias.

El Parlamento húngaro votó ayer a favor de una ley presentada por el gobierno de Viktor Orbán  que niega el derecho a la identidad a las personas trans y no binarias. El artículo 33 del proyecto reemplaza la categoría de “sexo” con “sexo asignado al nacer” en el registro civil. Como resultado, la categoría no se va a poder modificar y las personas trans no podrán ser reconocidas legalmente con su identidad de género. 


“El sexo ingresado en el registro civil se basa en hechos determinados por los médicos, y declarados por el registro. El registro certifica los hechos y derechos que este (el sexo portante) incluye, hasta que se demuestre lo contrario. Por lo tanto, no crea derechos. Sin embargo, el sexo declarado por el registro podría crear derechos u obligaciones y, por lo tanto, es necesario precisar el término sexo (aclarando) al nacer. Dado que cambiar completamente el sexo biológico de uno es imposible, es necesario establecer en la ley que tampoco se pueda cambiar en el registro civil”, dice el proyecto.

Krisztina Tamás-Sáróy, investigadora de Amnistía Internacional, ha declarado: “Esta decisión hace retroceder a Hungría a la edad de las tinieblas y pisotea los derechos de las personas transgénero e intersexuales. No sólo las expondrá a más discriminación, sino que, además, ampliará el entorno que ya es intolerante y hostil, al que se enfrenta la comunidad LGBTI. Es fundamental que el comisario para los Derechos Fundamentales de Hungría actúe con urgencia y pida que el Tribunal Constitucional revise y anule de forma expeditiva las terribles disposiciones de esta ley”. 

Sin cambios registrales desde 2008


TransVanilla, organización civil por los derechos trans en Hungría, explica en su portal que si bien las personas trans han tenido derecho a hacer cambios registrales desde el 2003, no existe una ley que prevea un procedimiento para hacerlo, y que desde el 2018 a esta parte no se han admitido más cambios registrales. 

 
“No es sólo un ataque a las personas trans: es la imposición de un destino biológico, legitimado estatalmente, para todas las personas. Un intento elegante de saldar la discusión sobre lo identitario, como si este fuera un aspecto cultural indiferente para el estado, que regula lo verdaderamente importante: los hechos – como si hubiera, claro, una única forma de leerlos. Negar el respeto a nuestra identidad por parte del estado es negarnos en cuanto sujetos políticos: es narrar una humanidad en la cual nuestra existencia es eludible. Negarse a nombrarnos, a reconocernos, es la antesala de negar la existencia, y una forma tácita de fomentar el acrecentamiento de las manifestaciones de odio por parte de la sociedad civil hacia la población trans, travesti y no binarie”, escribe para Presentes, la activista travesti argentina Quimey Ramos.

“Sabemos que es posible existir incluso cuando un Estado niega tu identidad: nuestros cuerpos, resplandecientes desde siempre en los rincones de la historia oficial desde, son la demostración permanente de esa eterna rebeldía. Y sin embargo, no dejaremos de decir que el derecho a la identidad es parte inescindible del derecho a gozar de una vida plena”.

Todos nuestros contenidos son de acceso libre. Para seguir haciendo un periodismo independiente, inclusivo y riguroso necesitamos tu ayuda.  Podés colaborar aquí.



Somos Presentes

Apostamos a un periodismo capaz de adentrarse en los territorios y la investigación exhaustiva, aliado a nuevas tecnologías y formatos narrativos. Queremos que lxs protagonistas, sus historias y sus luchas, estén presentes.

APOYANOS

Apoyanos

SEGUINOS

Estamos Presentes

Esta y otras historias no suelen estar en la agenda mediática. Entre todes podemos hacerlas presentes.

COMPARTIR