17 de noviembre de 2018

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Fotos: Ariel Gutraich.

Con fiesta, color y mucha purpurina, Buenos Aires celebró la diversidad con miles de personas en las calles. La convocatoria arrancó en una Plaza de Mayo colmada por miles de personas y una marcha multitudinaria que tras recorrer avenida de Mayo, terminó al anochecer en el Congreso de la Nación. La jornada de la XXVII Marcha del Orgullo LGBTIQ+ empezó a las 11 de la mañana bajo la lluvia y continuó con sol. Hubo feria y stands, y ya cerca de las 14, miles de personas llegaban al epicentro de la celebración. Sobre el escenario Nadia Echazú se leyó, apenas comenzó la jornada, un documento consensuado por las organizaciones que integran la comisión organizadora de la marcha.

Se pidió: “Basta de genocidio travesti trans; basta de ajuste; aborto legal; seguro y gratuito para personas con capacidad de gestar; aprobación y efectivo cumplimiento del cupo laboral travesti trans en todo el país; urgente sanción de una ley de VIH; separación de la Iglesia del Estado; basta de lesboodio y absolución para Higui de Jesús y Mariana Gómez, entre otros reclamos.

#Orgullo2018 Gustavo y Abril son padre e hija. Esta es la primera vez que vienen a la Marcha. “Le pedí que me acompañara porque para mí es importante estar acá” cuenta Abril. “Yo nunca había venido y ahora vine por ella, que tiene 14 años y está haciendo su camino”. pic.twitter.com/PJHH6bY5d5

— Agencia Presentes (@PresentesLGBT) 17 de noviembre de 2018

También durante la tarde, en los impass de Dj Jara, distintas identidades del colectivo leyeron sus mensajes. “Somos foco de persecución, exclusión y estigmatización. Basta de genocidio trans”, dijeron mujeres trans. Lxs intertsex subieron para reivindicar el color amarillo “que no es del gobierno, ni del Vaticano”, expresaron. Y exigieron a la medicina “que deje de elegir sobre nuestras corporalidades y a la Justicia sobre nuestros genitales.  ¡Libertad y visibilidad a las identidades intersex!”

🇦🇷🌈#Orgullo2018 Las chicas de sexto año de la secundaria evangélica Instituto Fuente de Agua Viva de La Matanza. «Queremos la ESI en todas las escuelas, el aborto legal y la libertad para amar». pic.twitter.com/Xw6DTubH1J

— Agencia Presentes (@PresentesLGBT) 17 de noviembre de 2018

Los varones trans pidieron especialmente que se respete la ley de identidad de género para personas privadas de su libertad.

🇦🇷🌈#Orgullo2018 🇦🇷🌈#OrgulloNoBinarie «Visibilidad Y despatologización de las identidades no binarias» pic.twitter.com/Pgumjsgq9u

— Agencia Presentes (@PresentesLGBT) 17 de noviembre de 2018

Les binaries también reivindicaron sus identidades: “Deseamos crianzas libres de imposiciones binarias de las familias y del sistema educativo. ¡Visibilidad y despatologización de las identidades no binarias!”

🇦🇷🌈#Orgullo2018 🇦🇷🌈#Orgullo2018 Pablo y Mariano vinieron desde Rosario para vivir la XXVII Marcha del Orgullo de Buenos Aires. #AmorEsAmor#LoveIsLove#ALasCallesConOrgullo#AlClosetNoVolvemos pic.twitter.com/OnWk4yLhSP

— Agencia Presentes (@PresentesLGBT) 17 de noviembre de 2018

Hubo mucha música: Ayelén Beker y Mimi Maura tocaron sus canciones sobre el escenario. Dejaron al público agitado para el gran cierre, a cargo de Jimena Barón que hizo estallar la plaza antes de la marcha.

«Fue una marcha impresionante, con la Plaza llena desde temprano. Se escuchaban consignan con mensajes políticos entre la alegría de ser quiénes somos. Nos emociona poder generar un espacio de celebración a pesar de todos los retrocesos.», dijo a Presentes, María Rachid, coordinadora de la Federación Argentina LGBT (FALGBT). «Calculamos que en toda la jornada hay más de 400 mil personas», agregó.

Muchxs de los asistentes se quejaron: Jimena Barón usó la expresión «los travestis». También, algunxs activistas destacaron la falta de combatividad de esta marcha, a la que vieron «lavada», en comparación con años anteriores. «Esta es una fiesta para pocxs, porque a las abolicionistas y las travestis pobres que vemos a la prostitución como opresión, no estamos invitadas. Los camiones antes demostraban el poderío de las organizaciones», dijo a Presentes, la activista travesti Alma Fernández. Y agregó: «Queremos decir que nuestro orgullo no se le va a regalar ni a la ciudad, ni a Horacio Rodríguez Larreta ni al macrismo. Con ajuste y represión no hay celebración».

A partir de las 17, empezaron a marchar las carrozas por Avenida de Mayo hacia el Congreso Nacional entre la fiesta que subía en intensidad y muchos reclamos por el aborto legal y el presupuesto para el programa de VIH/sida. «Sin medicación nos morimos» o «No al ajuste en salud», eran algunos de los carteles que se leyeron. Pasadas las 20, llegaron todas las carrozas al Congreso, donde esperaba el escenario de cierre. Allí se leyó el documento final. «Las disidencias no vivimos en un tupper. Somos trabajadores y sufrimos el ajuste. La nueva ola de derechas hace que hoy por besarse echen a dos varones de una pizzería de Palermo y a dos chicas del Mercado de San Telmo. El ajuste, la violencia y la discriminación que vivimos, tienen responsables: este gobierno. Macri y la Iglesia son antiderechos. Pero la ola feminista y disidente va por más».