13 de agosto de 2018

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Por Lucas Gutiérrez 

“Imparables” es un ebook que opera como radiografía de organizaciones, medios de comunicación y estado de los derechos de las comunidades LGBTI+ en América Latina. Fue publicado por el medio Distintas Latitudes y a cargo de la investigación estuvo el periodista Diego Pérez Damasco, uno de sus editores.

“Distintas latitudes es un proyecto periodístico cuya misión es contar América Latina desde América Latina.  Muchas veces la región se cuenta desde la BBC o desde el NY Times y no desde nuestros propios países”, explica a Presentes este periodista de 25 años.

De los 20 países analizados, solo 4 cuentan con matrimonio igualitario en todo su territorio, 2 tienen algún tipo de figura que se le asemeja y solo 3 protegen los derechos a la identidad de las personas trans. “Creo que tenemos que recordar todo lo que hemos avanzado como un impulso, pero seguir moviéndonos ya que si no dejaremos de ser imparables”, dice Pérez Damasco.

Centroamérica

Pensar Centroamérica como una pieza entera y uniforme es un grave error. Damasco detalla que esta puede ser leída desde dos realidades diferentes: el triángulo norte formado por Guatemala, Honduras y El Salvador, y luego la parte sur dónde encontramos a Nicaragua, Costa Rica y Panamá. “En temas de derecho el triángulo norte lo único que tiene es que no se penaliza la homosexualidad, pero en la práctica eso no significa mucho ya que no hay leyes antidiscriminación e igual sufren como si se penalizarán”. Y continúa: “Dentro de América Latina ésta es la región que más genera personas perseguidas por su orientación sexual e identidad de género que deben buscar refugio en otro países”.

Diego analiza país por país y comparte tantas realidades como banderas. En El Salvador recientemente más autoridades expresaron estar dispuestas a poner banderas LGBTI+ durante el mes del orgullo, “Son avances pequeños, simbólicos, pero  importantes”. Honduras no presenta novedades beneficiosas y “en Guatemala el riesgo es la aprobación de una ley que da carácter constitucional al matrimonio entre hombre y mujer y prohíbe a futuro cualquier reconocimiento de uniones de personas del mismo sexo y el aborto en cualquier forma. Se llama ‘ley por la vida y la familia’ y ya se aprobó el primer debate, es una amenaza y precedente muy fuerte para la región”.

Dentro de la parte sur tenemos a Nicaragua que está viviendo momentos de máxima tensión social con más de 200 muertos y por encima de los 1300 heridos. “Había instituciones LGBTI+ pero las alianzas del gobierno con las iglesias evangélicas y católicas lo han limitado todo”, narra Damasco sobre un país que tiene un gobierno con un lema que reza: Nicaragua socialista, solidaria y cristiana.

Panamá, Costa Rica y más países son revisitados y analizados en ‘Imparables’. Entre estos se encuentra el centroamericano Belice que en 2016 despenalizó la homosexualidad. Si, hace dos años. Son muchos países, son muchas realidades.

El rol del Estado

Para este costarricense, la presencia del Estado en relación a las poblaciones LGBTI+  es compleja. “En el triángulo norte es enemigo, hasta a veces ejecutor. En Honduras tras el caso del golpe de Estado y ante la falta de control, el Ejército y la policía se encargaron de hacer ‘limpias’. Los asesinatos de personas LGBTI+ fueron un espanto”, detalla.

‘Imparables’ dibuja un mapa de avances y duras realidades. En países como Chile y Ecuador dónde existe la figura de unión civil para personas del mismo sexo, Damasco dice que el Estado no termina de asumir su responsabilidad completamente: “Los gobiernos, las asambleas legislativas y cualquier institución estatal no quieren asumir abiertamente el costo que significa apoyar iniciativas que favorezcan a las poblaciones LGBTI+”

Costa Rica

En enero de 2018, un mes antes de las elecciones presidenciales, cuando la Corte Interamericana de Derechos Humanos emitió la opinión consultiva para que se garanticen los matrimonios igualitarios en, entre otros, Costa Rica el escenario cambió. El candidato del conservador Partido Restauración Nacional (PRN), Fabricio Alvarado, que en noviembre tenía un 2% de intención de voto, al pronunciarse contra la decisión de la CIDH escaló a tal punto que lo llevó a encabezar las encuestas. Finalmente y en una segunda ronda electoral dónde debió medirse con otro Alvarado, el escritor Carlos Alvarado, perdió pero igual así dejando su partido mucha presencia y representatividad en la legislatura. Lo sucedido alertó al movimiento LGBTI+, Costa Rica no estaba tan bien como pensaban.

“Estos movimientos antiderechos llevan construyendo sus bases. Las iglesias evangélicas van llenando el vacío que dejaron los Estados, la sociedad civil y hasta la propia iglesia católica y es muy complejo ya que se acercan a la gente y al poder de la mano de posiciones anticientíficas y antieducación que no solo perjudican temas de DDHH sino a todo en general”, explica Diego.

Imparables

“Aunque el panorama es un poco sombrío en varios casos yo creo que el título ‘Imparables’ observa que en retrospectiva se ha avanzado mucho en términos legales y de percepción. Ese avance es el que ha hecho que estos grupos antiderechos estén con esa desesperación, que se organicen para contrarrestar el avance de lo que se veía inevitable”, dice Diego mirando el ebook que comparte la experiencia en más de 20 países.

El ebook está disponible para su descarga en la web de Distintas Latitudes. Recursero de contactos y espacio para encontrarse en esta realidad que si necesita de algo para avanzar es tejer lazos y redes, ‘Imparables’ nace como voz y herramienta. Y sigue.

El trabajo de Pérez Damasco y el equipo de Distintas Latitudes no está terminado: a partir de ahora entran en una etapa de actualizar y agregar todo lo que vaya sucediendo en la región: “estamos buscando como convertir los resultados en una base de datos interactiva con mapas y perfiles donde ojalá se pueden actualizar los avances”, dicen desde este equipo que sigue trabajando y anhelando que el movimiento LGBTI+ continúe siendo imparable.