Una trans de 34 años fue asesinada de un tiro en Florencio Varela
El 2017 cerró con otra víctima trans que sumándose a la lista de muertes de trans y travestis en Argentina. Carolina Angulo Paredes, de 34 años, fue asesinada de un tiro en el pecho en la madrugada del 29 de diciembre, en Florencio Varela.
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Por Maria Eugenia Ludueña El 2017 cerró con otra víctima trans sumándose a la lista de muertes de trans y travestis en Argentina. Carolina Angulo Paredes, de 34 años, fue asesinada de un tiro en el pecho en la madrugada del 29 de diciembre, cuando estaba en una estación de servicio en Florencio Varela. La investigación por su muerte quedó en manos de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N°3 de Berazategui, a cargo de Gabriela Mateo. Por ahora, se caratula “homicidio agravado por uso de arma de fuego”. Así lo informó a Presentes el instructor judicial Diego Feustel, de la fiscalía 3. Sus compañeras dicen que Carolina no recibió adecuada ni pronta atención médica. Otrans Argentina denunció que se trata de la quinta muerte de una trans y migrante en el transcurso del 2017. Amigas de Carolina que pidieron mantener en reserva su identidad contaron a este portal que el 29 de diciembre, pasadas las 3 y media de la madrugada, la víctima se encontraba junto a otras compañeras en una esquina en avenida Calchaquí y calle 15, Florencio Varela, provincia de Buenos Aires. “Estaba trabajando”, dijo una de sus amigas que, al igual que Carolina, excluída y discriminada del mercado laboral por su identidad de género, ofrece servicios sexuales. En la provincia de Buenos Aires, existe una ley de cupo laboral trans que se votó en la legislatura en septiembre de 2015, pero lleva más de dos años sin reglamentarse. “La moto se acercó a Carolina, los pibes le dijeron algo. Ella le respondió a uno de ellos: “a vos no te conozco”. Él sacó un arma, le apuntó y le disparó en el pecho. Se quedó ahí unos minutos más, apurando a las demás chicas y chicos que estaban ahí. Las compañeras tenían mucho miedo”, contó una amiga.
Las compañeras denunciaron falta de atención
“Carolina se cayó hacia un costado, pero estaba consciente, incluso se sentó hacia un costado y se echó. Pedía que por favor la ayudaran. Vino la policía y la ambulancia, pero estuvo ahí tirada y sin asistencia durante bastante tiempo. Las chicas intentaron socorrerla. Murió minutos antes de las 8 de la mañana en el hospital Evita de Berazategui. Si alguien la hubiera llevado en el momento, quizás hubiera podido vivir. En la Shell deben estar las cámaras con todo lo que pasó”. Frente a esta denuncia de las compañeras de que Carolina no fue asistida rápidamente, fuentes vinculadas a la investigación dicen que el personal policial llegó al lugar a partir de un llamado al 911. Y que la ambulancia tardó, según las declaraciones testimoniales, 25 minutos. Que fue trasladada al hospital Evita en estado de shock. Que las radiografías indicaron que no tenía órganos vitales afectados y que los médicos creyeron que estaba fuera de peligro. Pero posteriormente, según la versión de fuentes judiciales, una tomografía mostró que la bala estaba cerca de un órgano vital y decidieron operarla. Carolina falleció en medio de la operación, pasadas las 7 de la mañana. Por ahora, informaron fuentes vinculadas a la causa, no se puede establecer que la demora en la intervención quirúrgica responda a negligencia de los médicos.«En la muerte de Carolina hay un componente transfóbico y xenófobo»
Carolina era peruana. Había llegado a la Argentina diez años atrás, desde la selva de Yurimaguas, al norte de ese país. “Era muy querida por las compañeras. Pasó cinco años presa injustamente, por una causa que le armaron. Estuvo detenida en el penal de Florencio Varela, donde hace poco falleció Damaris. Y estaba haciendo los papeles para viajar a Perú a visitar a su familia el mes próximo”, contó una amiga. Damaris Becerra Jurado también era peruana y activista de Otrans Argentina, una organización que reúne mayoritariamente a travestis y trans migrantes. Falleció en la madrugada del 26 de noviembre de 2017 en la Unidad Penitenciaria Nro. 32 de Florencio Varela. Otrans viene denunciando detenciones arbitrarias y causas armadas, a las que le siguen tratos degradantes, falta de acceso a la salud y, finalmente como en el caso de Damaris, la muerte.[LEER MÁS: Muere otra mujer trans en contexto de encierro: es la cuarta en 2017]
Claudia Vasquez Haro, presidenta de la organización Otrans Argentina, señaló que “en la muerte de Carolina hay un componente profundamente transfóbico y tambien xenófobo, vinculado al racismo. Nos preocupa no solo como organización sino como sociedad. El Estado debe tomar cartas en el asunto. Vemos cómo las prácticas discriminatorias por razones de identidad de género y orientación sexual se incrementaron desde que asumió este gobierno”.Quinta muerte trans y migrante de 2017
Otrans Argentina denunció que se trata de la quinta muerte de una trans y migrante en el transcurso del 2017. Antes fueron Pamela Macedo Panduro, Angie Velázquez Ramírez, Brandy Bardales Sangama y Damaris Becerra Jurado, todas peruanas, igual que Carolina, y activistas de Otrans. “Esta muerte se inscribe en un contexto de incremento de violencia institucional, muertes y asesinatos por la transfobia y crímenes de odio hacia las identidades trans y travestis en Argentina. Carolina, como tantas otras compañeras que se encuentran en situación de prostitución vienen demandando la implementación de la ley de cupo laboral trans a la gobernadora María Eugenia Vidal, hasta el día de hoy no tenemos ninguna respuesta. Exigimos al Poder Judicial que investigue la muerte de nuestra compañera y se haga justicia. Basta de travesticidios, basta de discriminación y basta de transfobia y crímenes de odio@, expresó Otrans a través de un comunicado. ]]>Somos Presentes
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