Por Paula Bistagnino Víctor Doroschuk, un pastor evangélico de San Rafael con más de 10 mil fieles y  una columna diaria en la Radio Pública LV4, dijo al aire que la homosexualidad es un pecado que “lleva a la muerte». Más de doscientas personas firmaron una presentación ante el INADI y el próximo 23 de noviembre deberá asistir a una conciliación. También fue denunciado por sus dichos ante la Defensoría del Público. El pastor evangélico Víctor Doroschuk, titular de la Iglesia “Ministerio Vida y Paz”, con más de 10 mil fieles en la ciudad mendocina de San Rafael, fue denunciado ante el Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (INADI) y la Defensoría del Público de Servicios de Comunicación Audiovisual, después de decir al aire por la radio pública local que «la homosexualidad es un pecado», «no lleva a ningún buen puerto, lleva a la muerte» y “hay que denunciarlo”. La demanda fue iniciada por Lucas Butcher, un joven de 19 años oriundo de Quilmes, que vive en San Rafael desde hace tres años. “Cuando me llegó el audio no me sorprendió. Es una sociedad muy conservadora y en la que han pasado cosas como que la gente vaya a tirar piedras a la Marcha del Orgullo. Pero eso no significa que no me haya parecido gravísimo que este hombre pueda hablar así libremente en la radio pública de la ciudad”, le dijo a Presentes. Después de que se conocieran los dichos del pastor -salieron al aire el 30 de octubre- Butcher y otro joven, Diego Silvestre, encabezaron las denuncias. Lograron muchas adhesiones y se presentaron con la firma de casi 300 personas más. “El poder de este hombre en San Rafael no es menor. Guía a una comunidad religiosa de miles de personas, tiene un colegio y muchos programas sociales en barrios. En eso se apoyan quienes lo defienden.  Además habla todos los días en la radio. Lo que dice llega a muchas personas”.

«Queremos una disculpa pública»

La presentación que radicaron ante el INADI la patrocinó la abogada Mariela Herrera, desde la filial de San Rafael de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH). “Nosotros nos sumamos, pero hay que destacar que estos dos jóvenes fueron los que tomaron la iniciativa”, dijo Herrera. Y confirmó que se presentó otra denuncia ante la Defensoría del Público de Servicios de Comunicación Audiovisual. Ahora evalúan hacer una denuncia penal complementaria. La denuncia ante el INADI advierte que los dichos del pastor «instan a los cristianos a la persecución y el odio contra los integrantes del colectivo LGTBI”, y que se basan «en un análisis homofóbico de la Biblia». A raíz de estas acciones, el 23 de noviembre habrá una audiencia con las partes en las oficinas de la delegación del INADI de la ciudad de Mendoza. “Queremos una disculpa pública en todos los medios y el compromiso de que no va a seguir defendiendo públicamente  la idea discriminatoria de que la homosexualidad es una enfermedad», dijo Butcher. Con la denuncia ante la Defensoría del Público, también se pide que haya «spots sobre diversidad sexual y derechos para intentar reparar el daño ocasionado. También estamos evaluando exigir un espacio  en la radio”.

“La discriminación LGBT encabeza las denuncias en Mendoza”

Daniel Di Giuseppe, delegado provincial del INADI en Mendoza desde marzo de 2016, explicó a Presentes que este caso  no es excepcional. Existen antecedentes de religiosos denunciados por discriminación y por alentar a la violencia contra la diversidad sexual. El caso más reciente:  el del sacerdote de Malargüe Jorge Pato Gómez. En julio llamó a “alzarse en armas” contra la educación sexual. “Por eso es muy positiva la reacción que estos dichos tuvieron en la sociedad de San Rafael: quiere decir que estamos muchos menos dispuestos a tolerar este tipo de declaraciones y actitudes. En el año y medio que llevamos de gestión, el 23 % de las denuncias que recibimos son por discriminación por orientación o identidad de género, y son las que encabezan el ránking”, destacó Di Giuseppe. Mientras el INADI evalúa su decisión sobre el caso, el funcionario dice que le llama la atención la persistencia del pastor en sus dichos  con el argumento de la libertad de expresión. “La libertad de expresión deja de serlo si viola leyes o derechos de otros”.

“Él puede pensar eso pero no decirlo en un medio público”

Presentes se comunicó con el director de la radio LV4 de San Rafael, Martín Rostand (a cargo desde marzo). La emisora forma parte de Radio Nacional. Rostand dijo que fue él quien le propuso al pastor Doroschuk tener un espacio, pero se separó de los dichos del religioso con el argumento de que el espacio fue cedido a través de un “convenio de emisión” y expresó que por lo tanto «no es responsabilidad de la radio» ese contenido. Sin embargo, no condenó sus dichos: “Además, yo no puedo ejercer la censura previa y por lo tanto no sé con anterioridad qué es lo que va a emitir. Pero apenas me enteré lo llamé y le dije que él puede pensar lo que quiera, lo que su creencia diga, pero no puede decirlo en un medio público”. Aunque Doroschuk no se retractó ni pidió disculpas por sus dichos, sino que los justificó en su descargo en Facebook y en un diario local –el primero que publicó la noticia y terminó disculpándose con él por la interpretación de sus dichos-, Rostand dice que aceptó las disculpas y explicaciones del pastor: que se trata de un audio “viejo” y que lo que él hace es citar pasajes. “Yo soy agnóstico y no profeso ninguna religión, pero creo en la función social de las religiones y respeto mucho la tarea que el pastor hace en San Rafael. Lo conozco hace tiempo, tengo casi una amistad con él y surgió la idea de esta columna, que es algo que siempre hubo en la radio pública de acá”, dijo Rostand.  Admitió que los dichos del pastor son suficientes para rescindirle el convenio, pero dijo que esperará a la decisión del INADI para evaluarlo.

Qué dice el audio del pastor

“Hay pecados que se han metido en el seno del hogar, en la sociedad contemporánea y en los medios (…) Dios no cambia, los tiempos sí, el mundo sí. Lo que es pecado, pecado es. La Iglesia parece que hoy tiene miedo de decir que la homosexualidad es un pecado y hay que denunciarlo (…) Nosotros no tenemos que juzgar a los pecados. Tenemos que denunciarlo: decirle la gente ‘esto es pecado’ y lleva a la muerte. ¿Qué hay que hacer? Denunciar y para eso hay que ocupar todos los medios que tenemos al alcance: radio, televisión, literatura (…) Pero también, paralelamente, anunciar las buenas noticias: que el que se arrepiente, el que busca a Dios, encontrará libertad, solución y vida eterna”, dice el audio que Doroschuk difundió el 30 de octubre en su columna diaria “Sembrar valores”.

“Yo no odio a los homosexuales”: descargo de Doroschuk en Facebook

Apenas los medios se hicieron eco de la polémica, Doroschuk escribió una columna en su página de Facebook. Lo siguen más de seis mil personas y suele publicar mensajes “pro-vida” y contra “la ideología de género”.  La tituló “La verdad y nada más” y allí puso el audio emitido, argumentando se trata de una columna grabada en 2009. Y señaló que “muchos periodistas han distorsionado, sacando frases de contexto y agregándole un componente discriminatorio que jamás existió, creando una difusión basada en la mala intención y por sobre todo generando una discriminación y un ataque directo a nuestra confesión religiosa”. Luego, justificó su afirmación de que la homosexualidad es un pecado: “Está claro en el audio que hago mención de varios pecados, y entre ellos, el de la homosexualidad, pues está expresamente detallado en la Biblia y ella es el libro Sagrado de todas las corrientes judeocristianas”. E intentó explicar qué quiso decir con “denunciar”: “Hice uso del término “denunciar el pecado” en el sentido de que la Iglesia de Cristo tiene la responsabilidad conferida por las escrituras de predicar y anunciar las prácticas que Dios en su palabra reprueba”. También, en las más de 40 líneas que escribió, aclaró que no habla desde el odio sino desde el amor y que hay una “clara discriminación y persecución” con él por su fe: “¿Me tildan de homofóbico? Yo no odio a los homosexuales ni tengo antipatía con ellos, al contrario, es un acto de amor predicarles el evangelio, y si no puedo leer y enseñar libremente lo que la Biblia me ordena, entonces hay una clara discriminación y persecución a la fe que profeso”.  ]]>