Al cierre de su visita a la Argentina, Vitit Muntarbhorn dio una conferencia de prensa en la sede de la ONU en Buenos Aires y adelantó su informe sobre la situación de la población LGBTI en el país. Si bien halagó los avances en materia legislativa, mostró preocupación por la vulneración de derechos de la población trans, la invisibilización de las lesbianas y la violencia institucional. Después de diez días de reuniones en Ciudad de Buenos Aires, el conurbano bonaerense y las ciudades de Mendoza y Rosario con activistas de la diversidad sexual, organizaciones de la sociedad civil y dependencias del Estado, el experto independiente de la ONU en derechos de la población LGBT, Vitit Muntarbhorn, dio a conocer un avance de su evaluación sobre la situación en materia de derechos de los colectivos LGBTI. Desde esta agencia, fue consultado acerca de si estaba al tanto de las dos detenciones arbitrarias de la policía que se produjeron en el marco de la semana #8M, y tuvieron foco en mujeres lesbianas. «Estoy al tanto de los ataques lesbófobos de esta semana en Buenos Aires y hay que visibilizarlos mejor» dijo el experto LGBT de la ONU Muntarbhorn. «Los medios de comunicación son fundamentales para visibilizar a la población LGBT», señaló Muntarbhorn.

“La violencia institucional se encuentra generalizada en la Argentina»

Entre los hallazgos y recomendaciones de su misión -que se convertirá en un informe más amplio en 2018, para una sesión del Consejo de Derechos Humanos-, el experto habló de violencia institucional, de falta de acceso a la Justicia pero también a derechos básicos -trabajo digno, salud, educación, vivienda-. «La violencia institucional se encuentra generalizada en la Argentina, históricamente muy arraigada en la sociedad y que yace en el corazón del problema de la violencia y la discriminación por motivos de orientación sexual e identidad de género. Un dilema importante es la impunidad del autor del delito, agravada por las dificultades que enfrentan las víctimas y los/las sobrevivientes que tratan de acceder al sistema de justicia», dijo. Agregó: “La violencia institucional,  mediante actos negativos y omisiones por parte de los funcionarios del estado, resulta una causa raíz de la violencia y discriminación en relación con la OSIG (Orientación Sexual e Identidad de Género), así como una consecuencia y un agravante, al tiempo que perpetúa el ciclo vicioso de abusos.  Algunos integrantes de las fuerzas de seguridad se encuentran involucrados en las violaciones en forma ostensible, siendo su impunidad un dilema aún mayor». E instó al Gobierno a realizar mayores esfuerzos en la lucha contra este tipo de violencia, agravada «por las dificultades que enfrentan las víctimas y sobrevivientes al intentar acceder al sistema de justicia en vista de que hay prejuicios inherentes contra los diversos grupos que demandan protección en conexión con la OSIG. La naturaleza de la violencia y la discriminación se complica aún más por el hecho de que es multidimensional y multifacética» LEÉ TAMBIÉN: [El experto LGBT de la ONU llegó a la Argentina para evaluar derechos] Elogió la legislación de la Argentina, sus “leyes y políticas progresistas” para frenar los ataques sobre las personas en razón de su orientación sexual o identidad de género. Pero advirtió que el ejercicio real de este marco dista de estar a la altura que marca la normativa. Destacó que en Argentina «hay leyes de vanguardia», por ejemplo, la existencia de una Ley de Identidad de Género y la Ley de Educación Sexual Integral. Pero también advirtió que muchas veces esos estándares no están en coincidencia con las legislaciones a nivel provincial o local. «Es crítico cómo implementar esas leyes a nivel local. Por ejemplo, es reocupante que aún se apliquen los códigos de faltas y contravenciones que discriminan a las personas LGBT en las provincias», dijo el experto de la ONU.  «Las lesbianas y los varones trans están invisibilizadxs dentro del colectivo» Consideró que «el patriarcado y la falta de empatía en relación con la diversidad son factores agravantes. Detrás de todo ello se encuentra la exclusión sociocultural, vinculada a la marginación cultural, económica y política que alimenta la dinámica de la violencia y la discriminación». Señaló al colectivo de las mujeres transgénero como el más vulnerable en materia de violencias en Argentina. «Las personas transgénero son quienes sufren las mayores violencias en Argentina y es importante una reparación estatal», dijo e instó a hacer un mapeo de los crímenes de personas transgénero. «Los asesinatos, las agresiones y el acoso se cobran muchas víctimas entre las mujeres transgénero en particular. Son parte de una comunidad especialmente vulnerable e invisible, ya que traen consigo una historia impregnada de pobreza y privación socioeconómica”. Apeló a la implementación de mejoras en el acceso a la educación, la salud, el empleo y la vivienda para las mujeres transgénero. Y también habló de dos colectivos invisibilizados. «Las lesbianas y los varones trans están invisibilizadxs dentro del colectivo y esperamos una mayor cobertura y políticas» dijo el experto LGBT ONU. Consultado por las y los periodistas presentes en la conferencia, el experto contó que se sorprendió con experiencias de buenas prácticas a pequeña escala. Destacó entre ellas la de la peluquería Las Charapas en La Plata, donde las mujeres en situación de prostitución acceden a un empleo. Y también el caso de una enfermera trans que conoció en su recorrida por el interior.

Las recomendaciones a la Argentina

Entre las recomendaciones, se refirió a «la necesidad de luchar contra la impunidad policial y judicial. Y mejorar el acceso a la Justicia» dijo Muntarbhorn. También remarcó como «fundamental que se implemente la ley de educación sexual integral y el acompañamiento a infancias trans». E instó a la Argentina a reformar las leyes y políticas que podrían conducir a la violencia y la discriminación. Habló también de evitar «que se utilicen leyes sobre drogas y moral pública para discriminar contra las personas sobre la base de su orientación sexual e identidad de género». Advirtió también: «Las instituciones del Estado tienen que estar en el territorio no en las oficinas». Y compartió con los presentes que en la recorrida escuchó muchos testimonios que hablaron de achicamiento de recursos para políticas públicas. «El acceso a la salud en el conurbano es preocupante. Al parecer antes era mejor y tiene que haber un mayor compromiso». «Designar y fortalecer la Defensoría del Pueblo de la Nación» Destactó la necesidad de «designar al titular y fortalecer la figura de la Defensoría del Pueblo de la Nación, asegurando la independencia del mandato en cumplimiento de los “Principios de Paris” sobre las Instituciones Nacionales de Derechos Humanos, respaldados por las Naciones Unidas». Recomendó, entre otras cosas, asegurar una mayor participación y representación de las mujeres y otros grupos sobre la base de su OSIG entre el personal del Poder Judicial y las autoridades de las fuerzas de seguridad; fortalecer los mecanismos internos y externos de supervisión para las fuerzas de seguridad, y sostener el compromiso de los recursos con distribución equitativa, en el ámbito provincial y local, de un modo duradero y no partidario. También aconsejó «permitir que una diversidad de personas trabajen en los organismos estatales así como en otras profesiones para contribuir a modelos positivos sobre la base de la OSIG». En su informe, también hizo lugar a las poblaciones encarceladas y a las personas que viven con vih. Propuso «asegurar una distribución equitativa y accesible de medicamentos e insumos afines, incluidos los fármacos para el VIH y las hormonas, como parte de una atención de la salud integral para todos y todas y, en particular, para las personas transgénero, en tanto se facilita el acceso a las cárceles del Ministerio de Salud para brindar servicios y entregar medicamentos». Por último, contó que eligió a la Argentina «como mi primera visita oficial en América Latina para agradecerle a los países de la región su rol de liderazgo en OSIC» dijo Muntarbhorn.

Quién es y qué hace el experto LGBT

El Experto LGBT Vitit Muntarbhorn nació en Tailandia, donde trabaja como profesor Emérito de la Facultad de Derecho, Universidad de Chulalongkorn de Bangkok. Su cargo no es rentado, sino que -contó en la conferencia- lo ejerce como voluntario, es decir que no es funcionario de las Naciones Unidas. Asumió su mandato el 1° de noviembre de 2016 y es el primer Experto Independiente sobre la protección contra la violencia y la discriminación por motivos de orientación sexual e identidad de género (OSIG). Los expertos independientes integran los Procedimientos Especiales del  Consejo de Derechos Humanos. Este sistema es el mayor conjunto de expertos independientes en Derechos Humanos de las Naciones Unidas. Se trata de «mecanismos independientes de hallazgos y monitoreo que abordan situaciones específicas de los países o cuestiones temáticas en todo el mundo». El documento completo y las recomendaciones, disponible aquí.  

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