En el país hay 120 mil personas que viven con vih y 89 de cada 100 adolescentes nunca se realizaron el test. Legisladores y organizaciones reclaman faltantes de medicamentos, reactivos y preservativos por parte del Estado. Desde el movimiento travesti-trans denuncian que el colectivo es uno de lo más afectados por el estas carencias, incrementadas por la falta de acceso a la salud, trabajo y educación. En los últimos meses, varias provincias de Argentina (Buenos Aires, Santiago del Estero, Salta, Tucumán, Catamarca, Jujuy y Santa Fe) reclamaron la falta de insumos para una correcta prevención y tratamiento del vih-sida, tanto reactivos, como medicamentos y preservativos. Según el último informe sobre vhi-sida, en el país hay 120 mil personas con vih. La edad del promedio de diagnóstico es de 33 años y 9 de cada 10 personas contrajeron el virus por vía sexual. Ochenta y nueve de cada 100 adolescentes nunca se realizaron el test. En el Día Internacional de Respuesta Frente al VIH, profesionales médicos y organizaciones civiles denunciaron que el Estado argentino no está acompañando a la personas que viven con el virus. Jorge Barreto es diputado nacional por el Frente para la Victoria e impulsor legislativo de la nueva ley de vih-sida, un proyecto que fue consensuado junto a 35 organizaciones civiles y especialistas del Ministerio de Salud de la Nación, tras dos años de reuniones y debates. Barreto dice que las denuncias de los faltantes en los programas deja en evidencia un estado de situación: “Hasta el año pasado se hacía compra de reservas insumos, que este año se están usando sin reponerse. Esos insumos, en el presupuesto, ya figuraban. Hay una subejecución en algunos casos y en otros una clara política deliberada que descuida la prevención, ya sea sin la compra de preservativos y más grave aun cuando se está denunciando falta de cócteles. Estamos frente a una política de vaciamiento ¿Cuál es la respuesta de estar consumiendo las reservas? Directamente no responden. Ni siquiera ponen la cara para dar excusas”, dijo a Presentes el diputado. Dentro de esas 35 organizaciones que participaron de la redacción de la ley, está la Red Argentina de Jóvenes Positivos (Rajap), un grupo integrado por jóvenes de entre 14 y 30 años que viven con vih-sida y tiene llegada a todo el país. “Desde principios de año, a partir del desarrollo territorial que tenemos como organización en los 24 distritos, notamos faltantes de diferentes insumos. Empezó con algunas marcas o tipos de medicación y siguió con faltantes para medir los CD4, es decir las defensas del sistema inmunológico. Después eso comenzó a solucionarse, pero empezaron a faltar preservativos y reactivos para medir la carga viral, que es la cantidad de virus que las personas que tienen en sangre. La falta de folletería sobre el tema la notamos desde 2015”, dijo a Presentes Matías Muñoz, integrante de Rajap. Fotos: cortesía de Rajap “Parte de nuestra línea de trabajo es poder dar seguimiento a las políticas públicas y denunciar en cuanto se vulneran nuestros derechos, por ejemplo como pasa con los faltantes. ¿Cómo nos enteramos? Nuestra organización está formada por casi mil chicas y chicos de todo el país, lo que significa que somos mil usuarios del sistema de salud. A través de nosotros mismos podemos hacer análisis y mapeo de lo que está pasando. Y en nuestra misma organización pudimos comprobar los faltantes que primero se dieron en algunas provincias y después se expandió a todo el país. Por ahí algunas provincias pudieron comprar sus propios insumos, porque tienen presupuesto, pero la gran mayoría no tenía previsto los faltantes”, dijo Muñoz. El responsable de acceso a la Información del Ministerio de Salud de la Nación, Pedro D’ielsi, respondió a Rajap una solicitud presentada para acceder a información sobre stocks de reactivos, medicación antiretroviral, preservativos, geles íntimos y folletería. La respuesta, que incluyó un informe de la Dirección de Sida y ETS con fecha 26 de agosto, dijo respecto de los reactivos para carga viral: “En la actualidad los laboratorios cuentan con stock para el procesamiento de urgencias, embarazadas, niños y confirmaciones diagnósticas. No se están recibiendo muestras para seguimiento”. Al referirse a los reactivos para CD4, el informe señaló que el stock cubriría hasta el mes de febrero del año entrante inclusive. Sobre los preservativos, el stock era de 1.360 .800, cuando el consumo estuvo planificado en 81.999.360 unidades. Es decir, 80 millones menos. En la misma línea, el director de la Fundación Huésped, Pedro Cahn, denunció en el diario Página 12 faltantes de preservativos. “En marzo, el entonces director de sida y ETS, Carlos Falistocco hizo un pedido para comprar 26 millones de preservativos. Pero todavía no llegaron, porque recién hace dos semanas se firmó la orden de compra. No me queda claro si es un problema de ineficiencia en la gestión o si están subejecutando el presupuesto”, dijo el médico infectólogo. El Ministerio de Salud es el principal distribuidor de preservativos y en la medida en que el Estado no los provee, los centros de salud y hospitales en las distintas provincias empiezan a tener problemas de stock. Falistocco renunció a su cargo en septiembre y adujo que se trataba por motivos personales. “Sabemos que los motivos personales de este profesional destacado son el vaciamiento y las trabas que vivió para poder desarrollar su trabajo”, contó Barreto.

Alerta travesti trans: sin cargas virales y con medicamentos cada 15 días

Florencia Guimaraes García, del movimiento de travestis y transexuales Furia Trava, contó a Presentes que la situación en la provincia de Buenos Aires es de emergencia: “Queremos visibilizar y denunciar que va a hacer diez meses no hay reactivos para las cargas virales en el Policlínico de San Justo y que la medicación está siendo racionada: antes las compañeras travestis y trans iban a buscar una vez por mes y ahora les dan para 15 días. No hay reactivos para las cargas virales y la incertidumbre de no saber cómo está el cuerpo juega totalmente en contra de las psiquis. Sabemos que es una enfermedad que en lo psicológico es fundamental”. La activista dice que la situación de las personas travestis y trans tiene sus particularidades, ya que viven una exclusión estructural para acceder a derechos básicos como la educación, el trabajo y la salud: “Hay que entender lo que nos cuesta a las travestis llegar a un hospital, no accedemos a la salud por muchas razones. Dar ese salto de acercarse, hacerte los análisis y decidir encarar un tratamiento ya es muy difícil, si encima empiezan con todos estos recortes hay que entender que repercute en la psiquis y el cuerpo de las compañeras. Estamos al tanto que la misma situación de recortes se está denunciando en todas las provincias. Esto es algo que empezó con el nuevo gobierno, hay carencias en la entrega gratuita de preservativos y percibimos otro discurso: dicen que si la carga viral está negativizada (es decir, cuando la cantidad de virus en sangre llega a niveles indetectables por efecto de la medicación) no hace falta hacer el examen cada cuatro meses, que con una vez por año está bien”.

El reclamo de una nueva ley nacional de vih-sida

La nueva ley que se iba a tratar hace dos semanas en la Comisión de Salud de Diputados quedó en suspenso hasta el año que viene, por falta de quórum en la sesión que le podría haber dado las firmas necesarias para continuar su curso. “La Alianza Cambiemos y el socialismo, con Hermes Binner a la cabeza, no quisieron dictaminar. Es lamentable la actitud de algunos diputados, incluso pedían tiempo para seguir debatiendo cuando ONUSida destaca que el trabajo que hay detrás de este proyecto: es evidente que no lo quieren tratar”, dijo Barreto. El proyecto suplantaría a la ley vigente que data de 1990 y sus puntos fuertes son incluir las enfermedades de transmisión sexual (ETS), darle una perspectiva de derechos humanos y la creación de grupos de monitoreo para controlar la efectiva aplicación y mejora. “En las metas diseñadas por la OMS y la ONUsida se habla de llegar para el 2020 a que el 90 por ciento de las personas viviendo con vih estén diagnosticadas, el 90 por ciento de estas personas estén en tratamiento y el 90 en tratamiento tenga la carga viral con niveles indetectables. Creemos que lo que se está haciendo en cuanto a la respuesta medicalizada es pensar en los primeros dos 90: testear y tratar. Si bien es efectivo y puede ser un método de acción, esto debe ir acompañado por políticas sociales para que las personas no dejen el tratamiento. También, sobre todo, hay que hablar de las políticas preventivas y el uso de preservativo, que sabemos que es el método más eficaz para la prevención del vih y las ETS”, dijo Muñoz. Y llamó a que el proyecto de nueva ley sea tratado más allá de los lineamientos políticos, ya que la actual legislación no incluye, por ejemplo, “a las personas que nacieron con el virus y crecieron más allá de los pronósticos desalentadores para ellas hasta hace solo algunos años, cuando se pensaba que no llegarían a la adultez”.

Por consultas, dudas e información:

Línea gratuita del Ministerio de Salud “0800 pregunte sida”: 0800-333-3444. También se puede visitar la página http://www.msal.gob.ar/sida/ Para denunciar faltantes o discriminaciones por parte de las obras sociales, se recomienda la Superintendencia de Servicios de Salud http://www.sssalud.gov.ar/, que tiene un Centro de Atención Virtual y una línea gratuita: 0800-222-72583. Ante cualquier discriminación, el organismo estatal INADI recibe consultas vía web http://www.inadi.gob.ar/asistencia/asistencia-por-discriminacion/ o telefónicamente las 24 horas en 0800-999-2345.]]>