Asesinaron a puñaladas a un activista gay en Colón

El colectivo LGBT Colón llama a una movilización hoy a las 13 para exigir el esclarecimiento de asesinato de Pablo Borsato en el Museo de la Ciudad.

El colectivo LGBT Colón llama a una movilización hoy a las 13 para exigir el esclarecimiento de asesinato de Pablo Borsato en el Museo de la Ciudad.

Por Alejandra Zani

El primer domingo de diciembre, a Pablo Fullana Borsato, arquitecto, militante de la diversidad sexual y artista que llevaba a cabo el proyecto Museo a Cielo Abierto, lo mataron en la localidad bonaerense de Colón. Lo encontraron en su casa, con los pantalones bajos y con varias puñaladas en el cuerpo. El único sospechoso del caso es un joven de 19 años, a quien fuentes del colectivo LGBT Colón, organización de la cual Pablo formaba parte, identificaron como Leonel Facio.

Mariano Acevedo, militante del colectivo y compañero de Pablo, contó a Presentes que el sospechoso fue detenido algunas horas luego del hecho por mostrarle sus genitales e intentar abusar de una señora de 81 años que lo denunció a la policía. Según nos confirmaron fuentes de la comisaría, el sujeto continúa detenido. El entorno de Pablo dijo a Presentes que no les constaba que Pablo conociera previamente al sospechoso. 

La causa quedó en manos de la Fiscalía Descentralizada Nª 2 a cargo del Dr. Ignacio Uthurry, secretaria del Dr. Gabriel Briñón. “La carátula de la causa por la que fue indagada la persona es por homicidio agravado por alevosía, ensañamiento y amenazas en concurso real. Esa persona fue detenida por este caso y en el transcurso del acto delictivo por presunto intento de abuso a una señora, y ahora se encuentra aprehendido”, explicó a Presentes el Dr. Gabriel Briñón, secretario de instrucción, y alegó que no podía brindar más información sobre la causa. 

El detenido se encuentra imputado por delito de tentativa de abuso sexual, amenaza y homicidio tanto por el hecho de la mujer como por la muerte del artista. “Hay mucha desidia con la justicia en Colón. La fiscalía no aparece nunca, siempre está ausente o no quieren dar información”, expone Luisina Miño, dirigente del Colectivo LGBT Colón, a Presentes. “Por ahora estamos manteniendo hipótesis sobre lo que le pasó a Pablo, sobre cómo lo encontraron, pero recién esta tarde la familia tendrá la autopsia”. 

«El detenido es un pibe violento»

Por su parte, Mariano Acevedo considera que más allá de la carátula con la que se presentó el caso ante la justicia, el asesinato fue con intención maliciosa. “No intentaron robarle, lo golpearon y lo asesinaron. El detenido, Leonel Facio, es un pibe violento que siempre quiere pegar o violar a alguien. Estuvo internado en un instituto en La Plata del cual se escapó a los dos días, y no era una persona que Pablo frecuentara”. 

Según Acevedo, quien tomó conocimiento de lo ocurrido por fuente directa de la anciana agredida por el acusado, Facio le gritó “ya maté a uno y ahora tengo ganas de matar a otro”. “Para nosotres es una situación muy complicada. Ahora es homicidio, hace dos meses fue el suicidio de un compañero del Colectivo LGBT que no tenía contención, no hay psicólogues con perspectiva de género en Colón, y tampoco contamos con una Secretaría de Diversidad o Defensoría LGBT. Colón es una ciudad muy conservadora y por eso el miércoles nos movilizamos para pedir justicia por Pablo”. 

“Venimos de esta situación hace años”

Pablo era arquitecto, artista y estaba llevando a cabo el proyecto de Museo a Cielo Abierto para convertir el Lago Municipal de Colón en un espacio artístico. También era referente y militante en el primer grupo LGBTI+ de la ciudad, el Colectivo LGBT Colón, que consiguió el cupo laboral trans en el municipio y que ahora estaba organizando la primera marcha del orgullo en la localidad bonaerense  

“La noticia del asesinato de Pablo es gravísimo. Todo indica que podría llegar a ser un crimen de odio, pero no hay que caer en el error de hacer una lectura simple. Colón es una pesadilla y venimos denunciando esta situación de violencia contra el colectivo y contra las mujeres hace años”, señala Rosana Margarita Albisini, abogada defensora de mujeres víctimas de violencia de género en la localidad de Colón e integrante del programa Género y Sexualidades de la Universidad Nacional de Rosario.

Para Albisini, hay que hacer una relectura del territorio donde se desarrolló este crimen en concreto. “En el caso del asesinato de Pablo, por ejemplo, el presunto asesino necesitaba un nivel de atención estatal que no existió. Y había alertas activadas sobre eso. Hay mucha violencia contra personas LGBT que tienen miedo de denunciar y también hay muchas denuncias hechas por mujeres a las que jamás llegaron a prestarse atención. Estamos alerta todo el día, tenemos a nuestras clientas en estado de pánico y tenemos a quienes van a denunciar con estado de pánico”. 

Esta mañana, la abogada confirmó que alguien había envenenado a sus perros. Esta situación se suma a una serie de amenazas que viene recibiendo en los últimos meses: pintadas insultantes en la pared de su estudio, la destrucción de su auto y la rotura de vidriera de la zapatería de sus padres, una tienda ubicada en un local histórico de Colón. “Nuestra localidad, como tal vez otras tantas localidades del interior, conserva intacta la dinámica desde la época del proceso militar. Convivimos con muchos abusadores que todavía están en el poder porque el sistema hace lo posible para reconstituirse, aunque eso signifique absorber algunas luchas de nuestros colectivos con la fachadas de la visibilización pero el trasfondo del control”. 

Albisini también visibilizó que no existe en Colón una Defensoría LGBT y que las fiscalías no están aplicando perspectiva de género. “Nosotras presentamos una propuesta, durante el gobierno de Scioli y también durante el de Vidal, para que en se capacite al personal de los juzgados de paz con perspectiva de género. Al día de hoy no hay capacitación de género en Colón. La jueza María Belén Pilar Ibarra está haciendo esfuerzos urgentes, más allá de la diferencia de criterios que podemos tener, pero está tan preocupada como todas las que trabajamos en Derechos Humanos”.


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